Sus responsables destacaron que, cuando los informes técnicos aconsejaban la demolición del inmueble, “tomamos la decisión de recuperar la historia de Melilla”.
La rehabilitación de uno de los edificios emblemáticos de Melilla, el de la Autoridad Portuaria, ha supuesto la recuperación de “una parte de la historia de la ciudad”. Así lo definieron ayer sus responsables una vez finalizadas las obras que comenzaron en el año 2005 y a pesar de que los informes técnicos recomendaban la demolición del inmueble a causa del estado de deterioro de su estructura. Desde entonces, y por empeño de su presidente y director, Arturo Esteban y José Luis Almazán, respectivamente, encargaron estudios técnicos para recuperar y rehabilitar el edificio y evitar el fatal desenlace.
Varios representantes del Gobierno local, liderado por el presidente Juan José Imbroda, visitaron las instalaciones por la mañana y Esteban le hizo entrega de una fotografía del puerto de principios de siglo que a partir de ahora lucirá en el Palacio de la Asamblea. No es la única fotografía de la Autoridad Portuaria durante el último siglo. Algunas de las instantáneas más curiosas se encuentran expuestas en el propio edificio, aunque en mayo, Esteban adelantó que se realizará una exposición histórica con todas ellas.
Tras visitar las nuevas y reformadas instalaciones, Imbroda no pudo más que destacar “el trabajo magnífico que se ha hecho” y remarcó la funcionalidad que se ha dado al edificio eliminando las viviendas antes existentes en la primera y segunda planta poniendo ambas “al servicio de los melillenses”. “El Puerto ha cambiado completamente porque la cosa ha funcionado y esa es la realidad”, destacó el mandatario local.
Y es que el espíritu de los responsables de la Autoridad Portuaria es que “una institución tiene que tener una aspiración de ofrecer algo más allá de lo que le compete en el lugar en el que reside y no dar la espalda a la sociedad”. Por ello, recordó, en el año 2005, cuando los informes técnicos aconsejaban la demolición del edificio, “nosotros no cejamos en nuestro empeño y buscamos las mejores consultorías técnicas para realizar el estudio correspondiente” y, durante el desarrollo de las obras “velar por la seguridad de los trabajadores” ya que la actividad diaria del Puerto de Melilla ha continuado en estos dos años de obras.
Por su parte, José Luis Almazán destacó la funcionalidad que las instalaciones del ente han adquirido tras las obras de remodelación y rehabilitación, transformando, principalmente, las viviendas de las plantas superiores que estaban en desuso en nuevas oficinas y una nueva y moderna Sala de Juntas para las reuniones del Consejo de Administración.
Algo más de dos millones de euros han servido para reforzar y sanear la estructura del edificio de la Autoridad Portuaria con vigas nuevas y refuerzos de muros y forjados en las tres plantas. Una reforma arquitectónica, a cargo de la empresa Isolux Corsán, que costó 557.000 euros.
La reforma arquitectónica se realizó en dos fases, cada una correspondiente a las dos plantas, en las que se trabajó en la retirada de los paramentos interiores, se realizó una nueva distribución de las oficinas eliminando las estancias correspondientes a viviendas y renovación de la solería, falsos techos, instalaciones, ascensor y mobiliario correspondiente. Todo ello con una inversión de 910.000 euros.
La tercera fase del proyecto consistió en la rehabilitación de la fachada con el saneado de los enfoscados, el cosido e inyección de fisuras, reparación de molduras, iluminación y una rampa de acceso en aras de cumplimiento de la normativa de accesibilidad, que se completa en el interior con un ascensor. Esta fase contó con un presupuesto de 219.000 euros.
Por último, la rehabilitación de la planta baja del edificio supuso una inversión de 408.500 euros haciendo todo el proyecto un total de 2.095.154 euros.
Una exposición repasará la historia de este edificio
Según adelantó ayer el presidente de la Autoridad Portuaria, Arturo Esteban, en el próximo mes de mayo se abrirá al público una exposición sobre la historia del ente portuario a través de diversas fotografías. Algunas de ellas, ya se pueden ver en las propias instalaciones en la calle de Marina Española, pues “la Autoridad Portuaria y el puerto de Melilla es una historia viva”. Así, la muestra ofrecerá al visitante instantáneas de las instalaciones portuarias a lo largo del último siglo, su evolución hasta lo que es hoy día y también incluirá una parte donde se detallarán las obras de rehabilitación de la sede portuaria. Unos trabajos ya finalizados que han hecho de la Autoridad Portuaria de Melilla “un edificio funcional y moderno”.