La policía melillense controla especialmente hasta el próximo domingo 19 de junio la seguridad de los vehículos destinados al transporte de mercancías y personas, como parte de una nueva campaña de la Operation Truck&Bus, que lleva a cabo a nivel europeo la asociación RoadPol (European Roads Policing Network)
En una nota de prensa de la Dirección General de Tráfico (DGT) se ha conocido que con esa iniciativa se apunta a camiones y autobuses -más allá del país en el que estén matriculados- y sus conductores. Las inspecciones se efectuarán en “toda clase de vías y a cualquier hora del día”, sobre todo en las carreteras por donde se mueven en mayor medida este tipo de vehículos.
En tal sentido, los oficiales tendrán en cuenta la velocidad a la que estos circulan, las horas de conducción y descanso, el tacógrafo, los posibles defectos técnicos, el exceso de peso y la seguridad de la carga, entre otros aspectos.
Además, atenderán a la documentación del vehículo y de quien lo conduce, así como el uso que hacen del cinturón de seguridad y el empleo del teléfono móvil mientras se está conduciendo. Además, los agentes efectuarán tests de alcohol y otras drogas.
La campaña está motivada por el hecho de que en España el transporte de mercancía (camiones y furgonetas) representa la segunda mayor cantidad de vehículos presentes en el país (14%). Pero las cifras no quedan ahí: en 2020 estuvieron involucrados en el 13% de los accidentes con víctimas en toda la nación, según datos de la DGT.
La entidad indica que ese año los camiones de más de 3500 kg se vieron envueltos en 2705 incidentes de este tipo (el 75% ocurrió en vías interurbanas), los cuales provocaron la muerte de 199 personas.
Por otro lado, los autobuses -que ocupan el 0,2% del parque automovilístico español- tuvieron presencia en 1362 siniestros (el 90% en carreteras urbanas) en los que perdieron la vida 18 personas.