“El covid no es juego. Es una pandemia que se transmite muy rápido”, afirma Hamed Elmorabi, enfermero de Salud Pública, lleva un año trabajando en el área de vacunación así como en el Centro Tecnológico, junto a los rastreadores militares, y que perdió hace unos meses a su madre como consecuencia del covid-19.
“Recientemente perdí a mi madre, hace unos cuantos meses por esto, por el tema de la pandemia, que es muy duro también. Ella lo cogió, se contagió, la tuvieron que ingresar en la UCI, estuvo varias semanas y falleció. Es muy duro la verdad”, cuenta.
Por ello, pide a la ciudadanía que se cuide y cumpla con las medidas de prevención sanitaria. “Es para concienciar a las personas de que es una cosa muy grave y de que hay que tomárselo en serio”.
Y recuerda que los casos activos han aumentado en Melilla en las últimas semanas, que hay una nueva variante del virus por lo que pide ser prudentes.
No deja de lado que durante el mes de noviembre más de 15 aulas han tenido que ser confinadas por algún caso positivo detectado y por ser contactos estrechos.
Sobre esto señala que “son muchos casos y hay que trabajar duro para que no se nos escape ningún caso”.
Colaboración con la Policía
En el trabajo diario, Elmorabi señala que al notificar los positivos de covid se han encontrado con reacciones muy diversas. “Hay personas que se lo toman con calma, hay personas que nos ayudan y facilitan la información que les pedimos y hay casos, como todo en la vida que no colaboran, que llamas y apagan el teléfono”.
En estos últimos casos, cuando la persona apaga el teléfono, insisten volviendo a llamar a otras horas, pero también cuentan con la colaboración de la Policía Local.
“Ha habido casos cuando por ejemplo no se ha podido localizar a un positivo, hemos llamado a la Unidad de Investigación de la Policía Local y ellos nos han facilitado otro número de teléfono, otra persona de contacto o simplemente se han acercado al domicilio para ponerlo en conocimiento de esa persona”, cuenta.
Protocolos y contactos estrechos
El Ministerio de Sanidad ha ido actualizando el protocolo de actuación sobre los contactos estrechos, que varía cada cierto tiempo.
Explica que actualmente, “por ejemplo, normalmente si la persona está vacunada y no pertenece a ningún grupo de riesgo o no es una persona inmunodeprimida es exenta de hacer el confinamiento. Pero si ese contacto estrecho no está vacunado sí se le aplica lo que es el confinamiento. Les decimos que tienen que estar en confinamiento durante 10 días”.
Aclara que es solo contactos estrechos los que pueden salir y sí están vacunados, pero respetando las medidas que establecen como no acercarse a personas con pluripatologías, usar la mascarilla, respetar la distancia y evitar entrar en interiores. En caso de ser positivo, la persona sí debe realizar el confinamiento.
Tanto los miembros de sanidad como los rastreadores tienen claro su objetivo: “intentar rastrear a todos los posibles contactos estrechos y que no se nos escape ninguno”.
El enfermero de Sanidad pide a la ciudadanía estar siempre alerta, ser cautelosos y prudentes. “Se tienen que cuidar, hacer caso de todas sanitarias que se les den y evitar contagiar sobre todo a personas mayores e inmunodeprimidas que son los que más lo pasan mal”, dice.
Por su parte el teniente Julio Salom, el jefe de la primera sección de Vigilancia Epidemiológica de Melilla, también envía un mensaje de prevención. “Tenemos unas medidas de prevención marcadas” que pide cumplir en la ciudad.