Socorristas de Melilla irán a juicio con Matersa, la empresa adjudicataria del servicio de vigilancia de playas durante este verano, que aún les adeuda el sueldo de agosto y la mitad de septiembre, aparte de las horas extra de julio, algunos sueldos de julio y el abono de multas de tráfico a los trabajadores que entraron a trabajar con su coche en Horcas Coloradas cuando la zona tenía el tráfico restringido durante la pandemia.
Fuentes de los trabajadores aseguraron a El Faro que este martes hubo un acto de conciliación entre empresa y trabajadores, en el que no se alcanzó ningún acuerdo, por lo que las diferencias deberán dirimirse en un juzgado.
Éste es el segundo acto de conciliación que se celebra entre Matersa y sus ex trabajadores de Melilla. Al primer acto de conciliación, la compañía no asistió. A este segundo actó, sí.
Como publicó El Faro, ni Matersa ni los socorristas han cobrado. La Ciudad Autónoma debe más de 230.000 euros a la compañía murciana, que no se abonan por irregularidades detectadas por la Intervención Municipal.
El presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, que lleva personalmente el tema, pidió un informe a la Intervención del Estado para saber si existen o no motivos para que no se abone la factura. Dos meses después el informe sigue sin llegar.
Como consecuencia, Matersa no ha cobrado los servicios prestados; los trabajadores no han cobrado sus sueldos y los melillenses se quedaron dos días sin servicio de socorrismo en las playas, al cierre de esta temporada de baño.
La Ciudad defiende que todos estos problemas se habrían evitado si la empresa hubiera cumplido con el requisito de solvencia que contempla el pliego de condiciones.
La empresa defiende que es solvente, pero que las empresas privadas no pueden utilizarse para financiar a la Administración.
Desde la compañía aseguran a El Faro que a finales de septiembre recibieron una notificación que les avisaba de que su contrato con la Ciudad Autónoma había sido anulado a mediados de agosto.
Por eso no entienden que ahora la Ciudad pretenda multarla con 30.000 euros por incumplir el contrato al no prestar servicios los dos últimos días de ese contrato, porque los trabajadores, al no cobrar sus sueldos, se negaron a renovar con la empresa para prestar servicio el 16 y 17 de septiembre.
Esos dos días no hubo socorristas en las playas de Melilla, pese a que el contrato público estaba vigente.
Matersa no facturó esos dos días a la Ciudad Autónoma.
Alguien en marzo de este año ya advertía a la Consejería de Seguridad Ciudadana que la empresa MATERSA además de no tener entre su objeto social el Socorrismo, tenía una anotación de Insolvencia en el Registro Mercantil de Murcia.