El Partido Popular de Melilla ha criticado que el Gobierno local se aferre a un trámite procesal para que Mustafa Aberchán, diputado por Coalición por Melilla, siga manteniendo su acta después de ser inhabilitado por el Tribunal Supremo a sufragio pasivo. Daniel Conesa, diputado de la Asamblea por el PP, dijo que tiene claro que van a alargar la estancia de Aberchán “lo que puedan”. Relató que ya enviaron un escrito oficial a la Mesa de la Asamblea para informar sobre dicha sentencia con la copia de esta y que pidieron que se convocara una reunión extraordinaria de la Mesa para tratar el asunto y aseguró que desde esta le informaron que no hay nada decidido al respecto.
Conesa insistió en que la sentencia es firme y que ha observado cómo desde el desde el Gobierno se va a “agarrar a un mero trámite procesal” después de que el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, informara de que están esperando una comunicación de la Audiencia. “Aludió el presidente a una consulta que había hecho a los servicios jurídicos”, dijo Conesa, para que se plasmara en un informe el procedimiento a seguir para la retirada del acta de diputado a Aberchán y remitirlo posteriormente a la Mesa de la Asamblea. Así pues, Conesa apuntó a que la estancia de Aberchán como diputado se va a alargar a no ser que este renuncie en la rueda de prensa que ofrecerá este miércoles. “Es lo que debería ocurrir si Aberchán y CpM fuera un político normal y un partido normal, refiriéndome a que asume las responsabilidades políticas cuando hay que asumirlas”, dijo.
Conesa reiteró en que Aberchán debería anunciar la renuncia a su acta de diputado, porque si no, matizó, se estaría incurriendo en una anomalía democrática, como ocurrió en el pleno del lunes. Relató que mientras la sentencia estaba recurrida, desde el PP no pidieron su renuncia al acta de diputado, pero reiteró que ahora sí es firme.
Expresó que se les “caía la cara de vergüenza” cuando vieron que desde el PSOE hablasen de dignidad democrática mientras callaban sobre el hecho de que un diputado condenado estuviese en la sesión y se preguntó que dónde estaba "la dignidad de la señora Rojas", vicepresidenta del Gobierno, al permitir esta situación.