Cerca de un centenar de personas acudieron este sábado al cruce de la pista de carros, en la rivera del río de Oro, para participar en la reforestación solidaria que organiza cada inicio de año el grupo Guelaya de Ecologistas en Acción, tras el día de Reyes. De esta forma, los melillenses pueden regalar algo vivo, no perecedero y que ayude a su entorno natural.
Al inicio de la jornada se esperaba plantar más de 150 plantas; sin embargo, finalmente ha sido un total de 240. Un 20% más que ediciones pasadas. “Hemos superado nuestras expectativas de lejos”, afirmaron. Todo un éxito, destacan desde el grupo ecologista. Esta acción se enmarca dentro del proyecto de Renaturalización del Río de Oro, que cuenta con el apoyo y la financiación del Ministerio de Transición Ecológica. Se espera que en los próximos dos años se planten cerca de 10.000 plantones que pondrá el vivero de Guelaya. Aunque señalaron que será inevitable continuar con el mantenimiento y seguimiento de la plantación por las pérdidas que se producirán en ese tiempo.
Manuel Tapia, uno de los responsables de Guelaya, destacaba contento lo multitudinaria que estaba siendo la jornada, ya que eran muchos los melillenses, ya sea en familia o en grupo de amigos, acudieron a la zona para aportar su colaboración. Dijo que en cuanto amenaza la lluvia los melillenses son muy reticentes a salir, pero en esta ocasión se dio la circunstancia de que el día amaneció con todo limpio tras la lluvia de la noche anterior y con un sol radiante.
Comentó que la dificultad que se presenta que la jornada sea tan multitudinaria es que toca organizar mucho. “Es lo que siempre decimos: mejor plantar uno bien que cinco regular; hay que decirle a la gente cómo se planta que aunque parezca fácil tiene sus cosas, como hacer un alcorque para lluvia, hacer un agujero profundo para que entre la planta entera”, expresó.
Último regalo de Reyes
Esta plantación ya se ha convertido en algo tradicional, y es un detalle bonito tras terminar con las Fiestas de Navidad, ya que se convierte en el último regalo del Día de Reyes.“Regalar algo vivo, que además puedes ir acompañándolo en su crecimiento e ir visitándolo con el tiempo y no es el típico juguete perecedero”, dijo Tapia.
Además, esta acción de reforestacción tiene tres vertientes: luchar contra el consumismo y los productos perecederos, ayudar al medio ambiente de Melilla, y contribuir a la causa solidaria, ya que este año lo recaudado va destinado a organizaciones que luchan que luchan por hacer justicia por las mujeres indígenas que están siendo asesinadas en Sudamérica al proteger su territorio de las industrias extractivas y que destruyen el entorno natural.
Por ello, desde Ecologistas en Acción sostienen la forma de vida de las comunidades están des rurales de esos territorios viven de forma sostenible, por lo que además hace imposible discernir que si los asesinatos a estas personas son o no atentados también contra el medio ambiente o a los propios derechos Humanos.
¿Qué se va a plantar?
Todas las especies que se plantaron este domingo son autóctonas de esta zona del norte de África. Son especies de semillas, que plantan los miembros de Guelaya en su vivero forestal, el cual podía verse al fondo ya que formaba parte del escenario de la la reforestación.
Uno de las especias autóctonas con más valor ecológico según la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, es el Tetraclinis articulata, o Araar. El que se encuentra en la zona del cruce del camino de carros tiene ya unos 15 años y es una especie de árbol muy emblemática para Melilla. Hay muy pocos ejemplares, los hay Cartagena y en otras zonas norteafricanas como Melilla. Al estar en peligro de extinción se cataloga como especie protegida.
Sin embargo, estos árboles casi ni se plantan, explicaba Tapia, ya que sus propias semillas están regenerando la zona. Por ello, con esta primera reforestación del año lo que se estuvo plantando son otras especies autóctonas como la sabina, el acebuche, el palmito o el algarrobo.
Destacó que este zona en unos 11 años ya hay árboles que superan la altura de las personas, y son de niños que vinieron anteriormente a plantarlos. Por lo que, se espera que pase lo mismo con los de este domingo.
Y se repoblará el barranco del Nano
Dentro del proyecto de renaturalización del río de Oro con el Ministerio se prevé la plantación de unos 10.000 árboles; pero Guelaya también firmó hace poco un acuerdo con la Ciudad Autónoma de Melilla, a través de su consejería de Recursos Hídricos y Políticas Ambientales, para reforestar las Zonas de Especial Conservación de Melilla (ZEC), que se encuentran en la Red Natura 2000. Esa zona ZEC, la del barranco del río Nano y la zona de los cortados de Aguadú.
En un par de semanas, se pondrán en práctica las actividades relacionadas con este convenio, ya que se comenzará con la primera forestación en el barranco del río Nano.
Por el momento se desconoce cuántos plantones serán porque desde Guelaya reconocen que no hay una cifra estipulada, “porque se trata de aportar plantones para los espacios naturales a lo largo el tiempo y según demanda”.
Adelantaron que una de las especies que se van a producir en el vivero es el Teucrium gnaphalodes, porque hay muy poquito y es una planta muy particular del barranco del Nano. Por lo que el número de ejemplares a aportar de esta especie dependerá del éxito de su implantación en este lugar.
Además, la semana que viene, vuelven a visitar la ciudad los alumnos de la Universidad de Siracusa de Nueva York, que ya han estado visitando Melilla en otras ocasiones. Estarán realizando un censo de aves junto a los responsables de SEO Birdlife Melilla, que estarán censando las aves invernantes para el Atlas de Aves en España.
Tras hacer esto, también acompañarán a Guelaya en la plantación de árboles en el vivero. “A ellos les gusta poner su granito de arena cada vez que vienen a Melilla, siempre para temas medioambientales, porque ellos consideran que es lo primero que hay ahora mismo”, dijo Manuel Tapia.