El centro de la ciudad es uno de los lugares donde la gente realiza sus compras, además del parque comercial. Aunque la imagen de esta zona de Melilla no muestra una gran aglomeración de personas, algunos melillenses asumen que a veces gastan más dinero del que deben, mientras otros aseguran que solo acuden a los comercios de ropa y calzado si lo necesitan. El concepto de consumista en Melilla es ambiguo por la gran variedad de declaraciones que El Faro ha captado.
Ana y Juani son dos mujeres que estaban mirando complementos en un comercio de la Avenida Juan Carlos I Rey recalcan que suelen comprar cada cuatro meses aproximadamente: “Gasto poco dinero, y lo hago cuando es necesario”.
Por otro lado, y a raíz de las pocas actividades para hacer en la ciudad, hay gente que recurre a las compras, es el caso de Juandi que la gran parte de sus gastos es para los juguetes de su hijo: “Te puedes gastar fácilmente unos 100 euros. Si es ropa el mínimo son 50”.
Juandi vive en el centro de la ciudad y admite que al final “se va picando de cada sitio”, aunque haya poco dinero en la cartera, y sobre todo si hay pequeños en el hogar. Este melillense asevera que una vez a la semana alguna compra puede caer.
Como comerciante de una tienda de moda, Ana asegura que muchas veces se compra por capricho. A pesar de esta realidad, las prendas básicas suelen comprarse por necesidad. “Es cierto que una se lo pasa muy bien comprando”, agrega la gerente.
La percepción de Ana es que el centro está animado, pero según qué día de la semana la afluencia puede variar notablemente. La opinión de Belén es distinta, ya que afirma que el centro está “normalmente” vacío. “Los turistas son los que suelen pasear más por aquí, porque nosotros solemos irnos fuera a consumir más. Aún así, ahora veo más tiendas”.
La expresión “de vez en cuando” es muy común en algunas personas como en el caso de Mª Carmen, ya que en muchas ocasiones no se sabe si estamos comprando más de la cuenta. Lo mismo pasa con los precios: “A veces gasto más y otras gasto menos”.
Una de las coincidencias de muchos ciudadanos es que el centro solía tener más ambiente anteriormente. Aún así, y ante la mayor oferta de productos en la península, el melillense siempre ha aprovechado algún día libre o fin de semana para ir de compras por Málaga o Almería.
Los viernes y los sábados son días en los que más turistas marroquíes se ven en el centro de Melilla, momentos que aprovechan para dar más vida a esta zona, que en ocasiones parece estar bastante abandonada.