Pese al compromiso de los representantes políticos, alcanzado en un debate en mayo de este 2019, para crear el consejo escolar, este aún no se ha materializado siendo una tarea pendiente. La petición data desde hace tres años y se refuerza porque Melilla y Ceuta son las únicas ciudades de España que no poseen uno.
José Luis Villena, presidente de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) de Melilla, explicó que están a la expectativa de la conformación del Gobierno de la Nación para enviarle a la Ministra de Educación una petición de los líderes de las formaciones políticas de la ciudad a fin de que instale y se den los pasos efectivos para la creación del Consejo Escolar de Melilla.
Con el inicio del curso escolar se debatirá la nueva Ley Educativa, por lo que plantean que se incluya como disposición adicional en la Ley, la creación de este órgano.
Este sería un espacio en el que el profesorado, alumnado, la administración y las familias puedan debatir sobre el sistema educativo de Melilla; unir ideas y llegar a conclusiones para mejorar la educación.
“El problema es que no hay hoja de ruta. En el mejor de los casos, hay son evaluaciones parciales donde faltan actores por participar dentro de la evaluación”, pero al no haber objetivos claros no se aplican las medidas correspondientes, comentó.
Al Melilla carecer de un plan claro sobre el sistema educativo, se desconocen las prioridades que se tienen como ciudad. Cada uno de los sectores del sistema educativo hace sus planteamientos, pero sin un foro o consejo escolar para debatir y unificar criterios.
El presidente de la FAMPA afirmó que la educación en Melilla está “en estado de emergencia. Necesita un plan de choque integral y participativo, suficientemente financiado”, dijo.
Dentro de las expectativas de la FAMPA, incluyen preparar con la Dirección Provincial de Educación la renovación parcial de los Consejos Escolares de los colegios de Melilla, pues “nos consta que hay muchos centros en los cuales las familias no cubren todos los puestos, todos los sitios que por ley le corresponde en los distintos centros educativos de primaria y secundaria y además mejorar un poco la participación de las familias ofreciendo formación”.
A la espera de la reunión
Hace tres semanas, aproximadamente, la FAMPA Melilla solicitó una reunión con el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, y la consejera de Educación, Gloria Rojas, para exponer la situación de los centros escolares y las principales problemáticas.
Estas pasan fundamentalmente por una mayor participación de la comunidad educativa en el sistema escolar; así como mejorar el sistema de becas, tanto en plazo como en cuantías y becas donde se incluye el programa de reposición de libros, la ayuda a las familias más necesitadas; sin dejar de lado el estado de los centros educativos.
“Especialmente los centros públicos presentan unas instalaciones completamente abandonadas por el Ejecutivo anterior”, dijo y acotó la necesidad de establecer mecanismos de apoyo e interlocución por parte de la consejería al ser, la de Melilla, la única federación de AMPA de España que no posee ayuda del Ayuntamiento.
De acuerdo con Villena, los centros públicos están en condiciones “precarias”, sobre todo, si se compara con los colegios concertados. “Esto ha sido así por dos causas. Una, porque la financiación por parte de la Ciudad Autónoma ha sido completamente insuficiente para los centros públicos y no tanto para los concertados y dos porque ha habido una inadecuada supervisión de los contratos de limpieza y mantenimiento por parte de algunas direcciones de los centros y de la Ciudad Autónoma que ha provocado el estado en el que se encuentra”, explicó.
El presidente de la FAMPA Melilla señaló que colegios como el León Solá, España, Hipódromo y el Juan Caro necesitan una inversión importante, “tanto de elementos estructurales como ser muros o pilares” así como con persianas en mal estado; pero a escala general hay problemas de climatización en prácticamente todos los centros públicos de Melilla.
La propuesta de la AMPA, que han mantenido en los últimos años, es que la Ciudad junto a los técnicos del Ministerio de Educación elaboren un índice y evaluación del estado de los centros, sean organizados por prioridades su atención, pero que además que establezcan tiempos razonables de tiempo para acometer las mejoras desde los Presupuestos Generales de la Ciudad.
“Es una petición técnicamente viable que nos parece lógica, pero que el Ejecutivo anterior ni siquiera se dignó en contestar y esperemos que en este nuevo curso y con el nuevo presupuesto sea algo que se aborde
Pedimos un #ConsejoEscolarMelilla porque confiamos en la necesidad de la implicación de toda la comunidad escolar.
Porque estamos a la cola en #España a nivel educativo y porque es nuestra responsabilidad.
Más participación en los centros, más democracia escolar: Familias, alumnado, administración y profesorado por la mejora del sistema educativo.
Además de protagonismo ¿Qué buscas Sr.Villena?Tu gestión está muy mal valorada por padres y profesores.Pero en una cosa si llevas razón la enseñanza concertada tuvo preferencia ante la pública por el Ayuntamiento anterior, como gobierno de derecha,derechísima que era.