El sindicato ha exigido transparencia en la operación de mantenimiento de Trasmediterránea
Comisiones Obreras ha mostrado cierta preocupación después de que el pasado octubre Acciona vendiera el 92,7% de su participación en Trasmediterránea por más de 260 millones de euros al Grupo Naviera Armas. Además del primer pago, también tiene que asumir el pago de otros 127,3 millones de euros de la deuda que dejó la empresa con otras sociedades de Acciona. A día de hoy, medio año después, la operación aun está pendiente de aprobación por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.
"Durante todo este tiempo, con el Convenio Colectivo de Flota abierto sobre la mesa y ralentizada en el tiempo su negociación, hemos asistido a través de los medios a un sin fin de informaciones de todo tipo entre quienes denuncian un futuro negro para Trasmediterránea tras esta venta, y quienes están seguros de lo que será su nuevo resurgir en el Grupo Naviera Armas".
Para CCOO, Trasmediterránea se ha convertido en "presa de todos, y nadie habla de los puestos de trabajo de todos los trabajadores y trabajadoras que componen los Grupos Trasmediterránea y Armas, que desconocen las estructuras y su composición".
Desde el Sindicato, se ha solicitado mantener una reunión con el nuevo Armador para conocer de cerca cuales son los planes de futuro y viabilidad para la empresa y la garantía de los puestos de trabajo.
"La ausencia de dialogo en este sentido por parte del Grupo Naviera Armas, hace sospechar de la inexistencia absoluta de un plan estratégico para una operación de esta envergadura dejando en tela de juicio el futuro del empleo en esta operación".