El Gobierno ha remitido un escrito a petición del Tribunal de Derechos Humanos a raíz del salto por el que fueron imputados los ocho guardias civiles. Se trata de la causa que ya archivó la Audiencia Provincial.
Como venía adelantando El Faro, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo aceptó, a principios de año, una denuncia contra España por el salto a la valla de Melilla y la actuación de los guardias civiles en octubre de 2014. La Corte puso de plazo al Gobierno para que respondiera a las acusaciones hasta el mes de mayo. Ahora, según han informado a este diario fuentes del caso, el Ejecutivo ha contestado defendiendo la "proporcionalidad" de la actuación de los agentes ante la investigación por supuestos malos tratos y un presunta devolución irregular de un inmigrante, conocido en la causa como 'Danny', un joven camerunés que, en el momento de los hechos, tenía 26 años.
Hay que recordar, sobre este caso, que se trata del mismo que, a principios de abril, archivó de forma definitiva la Audiencia Provincial de Málaga, al desestimar el recurso de cuatro ONGs.
Por esta actuación estuvieron imputados ocho agentes del Instituto Armado en la ciudad. Se trata de los mismos efectivos que, tras el sobreseimiento, fueron condecorados por el Ministerio del Interior con la Cruz al Mérito de la Guardia Civil y por Exteriores y Cooperación con la Orden al Mérito Civil.
Mismos argumentos
Las fuentes del caso también aseguran a El Faro que el Gobierno central siguió la misma línea que la defensa de los ocho guardias civiles. De hecho, apuntan que hablaron de un vídeo (grabado por la ONG Pro Derechos de la Infancia) que no estaba completo y del que se habían seleccionado fragmentos para sacar de contexto la actuación de los guardias.
Las citadas fuentes también afirman que, en su respuesta, el Ejecutivo español habla de falta de testimonios, en este caso, del propio 'Danny', una prueba que la acusación particular pidió tener en cuenta. Además, sostienen que el Ejecutivo argumenta que el joven maliense fingió un desmayo antes de ser llevado a Marruecos.
La acusación se esperaba esta respuesta del Gobierno
La acusación que llevó el caso de los supuestos malos tratos a pie de valla en octubre de 2014 ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo asegura a este periódico que se esperaba la respuesta que ha dado el Gobierno a la Corte internacional. De hecho, resalta que los argumentos que usa el Ejecutivo son similares a los que utilizó la defensa de los ocho guardias imputados cuando el caso lo estudiaba la Audiencia Provincial de Málaga.
También hay que señalar que El Faro intentó ponerse en contacto con los responsables gubernamentales para conocer la valoración que hacen de la respuesta del Ejecutivo a Estrasburgo. Sin embargo, pese a haber preguntado al Ministerio del Interior el pasado jueves, aún no ha habido respuesta.
El caso que estudia todavía el TEDH, y del que no hay una sentencia en firme, se basa en acusaciones de presunto uso excesivo de la violencia por parte de agentes de la Guardia Civil, al recibir, según la parte demandante, golpes mientras bajaba de la valla y una vez en tierra. Además, se investiga si se vulneró el Convenio Europeo de Derechos Humanos, al no ser informado el inmigrante de la posibilidad de solicitar asilo o de contar con asistencia letrada. Hay que recordar que esta persona fue supuestamente devuelta a Marruecos antes de que entrara en vigor la Ley de Seguridad Ciudadana.