El presidente del Melilla BC, Jaime Auday, había planteado a lo largo de la semana su deseo de finiquitar cuanto antes este compás de espera por el que actualmente pasa la entidad azulina, pues aún no sabe si podrá hacer efectivo en los despachos el descanso conseguido en la cancha.
El presidente del Decano (ya se verá si pierde finalmente esa condición), quería tener lista para ayer toda la documentación que entregará a la ACB explicando su propuesta de pago de las cuotas exigidas. En ella, querían plantear un plan para fraccionar el canon durante los próximos tres años con fondos propios, ya que “no había sido posible alcanzar los cinco millones de euros, por más que se hubiera corrido”, según reconoció el presidente.
Al final, ante la premura y con el interés de pulir esta petición, desde el club se ha optado por retrasar esta entrega hasta este próximo lunes.
Cabe recordar que el documento propuesto habrá de ser aprobado, mínimamente, por 13 de los 18 equipos que conforman la liga ACB de baloncesto, por lo que habrá de ser un documento convincente y que deje a las claras la viabilidad del proyecto melillense para el año próximo. La decisión habría de tomarse a finales de este mes en una asamblea extraordinaria de la Asociación de Clubes de Baloncesto, entidad privada que gestiona la liga de básquet de mayor nivel de Europa.
Ourense pelea
Mientras, en tierras gallegas, el Club Ourense Baloncesto sigue peleando por hacer realidad su sueño de poder jugar el año próximo en la Liga Endesa.
Actualmente, y como publicó ayer el diario La Región, el COB está pendiente de la respuesta definitiva de una entidad bancaria, que podría acabar por aportar el empujón definitivo de entrada de los gallegos a la ACB.
“La operación está definida y el banco ultima los detalles para tomar la decisión final. Las impresiones son positivas y el interés de las dos partes hace pensar en un desenlace favorable pero la respuesta final la dará la calculadora. La sección de riesgos será la que decida si se descarta la operación o aparecen ligados el nombre del banco, el logo del COB y de la Liga ACB finalmente”, recogía el periódico gallego.
Hasta el momento, los beneficiados de esta incapacidad de pago por parte de los equipos con una plaza asegurada en la ACB beneficia a aquellos que han certificado su descenso sobre el parquet esta temporada: el Estudiantes y Gipuzkoa Basket.