El máximo responsable de la Asociación Pro Derechos de la Infancia (Prodein), José Palazón, estuvo presente en las puertas del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) la noche del lunes al martes, cuando tuvo lugar una reyerta que dejó heridos leves a un argelino y a un sirio residentes del centro.
Palazón apunta que la proliferación de este tipo de altercados se debe a que, según apunta, hay cerca de 2.000 personas residiendo en el CETI. “Hay que ponerle remedio a la sobreocupación”, apunta el responsable de Prodein.
Asimismo, según apunta Palazón la ocupación actual responde a las entradas que se han producido esta semana, entre ellas la de los cerca de 80 sirios que llegaron el lunes. Para el líder de esta asociación, la solución en el centro no pasa por ampliar las plazas, sino por agilizar la salida de sus residentes.
“Se pueden tener 10.000 plazas, pero ésa no es una solución efectiva”, apunta Palazón, que argumenta que lo idóneo sería que el centro tuviera 500 sitios y que no llegasen a ocuparse. Asimismo, Palazón afirma que la situación no parece que vaya a cambiar, “porque en Nador hay muchos sirios desesperados”.
“Pequeños robos”
Por otro lado, sobre la posible implicación de no residentes en el centro en la reyerta, el máximo dirigente de Prodein asegura que “si en el CETI se vive mal, hay que imaginarse cómo están los que tienen que vivir en la calle”, apunta Palazón, que ve “normal” que se produzcan robos en las inmediaciones del centro por cómo viven los que están en la calle.
“Esto provoca más tensión todavía”, apunta el responsable de Prodein, que considera que esta situación, unida a la sobreocupación del CETI, en el que los residentes tienen que hacer largas colas para acceder a los servicios, están en la base de las peleas.