Un nuevo temblor de tierra se sintió en la tarde de ayer en Melilla. Según datos del Instituto Geográfico Nacional (IGN), el seísmo alcanzó los 3.9 grados en la escala Richter.
Desde el pasado 25 de enero, cuando un terremoto de 6.3 grados sacudió la ciudad, se han producido miles de réplicas a menor escala. La mayoría de ellas no se han sentido, aunque varias decenas sí lo han hecho.
Según sismólogos consultados por El Faro, esta situación es habitual, pues, tras el primer seísmo, la tierra desplazada tiene que volver a su sitio, lo que causa los temblores.
El terremoto de ayer se sintió pasadas las 16:30 horas, aunque no tuvo ninguna consecuencia de gravedad.
El Faro contactó con el Cuerpo de Bomberos para comprobar si habían tenido que efectuar alguna intervención relacionada con el seísmo. Sin embargo, sólo indicaron que habían acudido a sanear la fachada de un edificio en la calle García Morato. En dicho inmueble había unas losas “a punto de caer al suelo”, pero la rápida actuación de los agentes lo evitó.