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Los melillenses llegaron a los compases finales con un 4-2 a su favor pero dos jugadas desgraciadas hicieron que volaran dos puntos de nuestra ciudad
El Melistar F.S. dejó ayer escapar dos puntos de nuestra ciudad al empatar frente a la U.D. Coineña (2-2), en un encuentro que los melillenses ganaban a falta de 13 segundos para el final del encuentro. Un tanto de Tati, sobre la bocina, significó el empate del cuadro malagueño, que se llevó demasiada recompensa si observamos el buen trabajo que realizaron cada uno de los jugadores de la escuadra de nuestra ciudad durante todo el partido.
El partido comenzó bien para el Melistar, pues en el minuto 3, Fernan recuperó el balón, se lo cedió a Raúl para que, de tiro cruzado, batiese a Jaime e inaugurara el marcador.
Los de Álex Casado, que ayer debutó como primer entrenador del Melistar, llevaban el mando del encuentro y, en el 13’, Rafita recuperó el esférico en su cancha, se fue por velocidad y, ante la salida del portero lo superó con una perfecta vaselina llevando el 2-0 al electrónico.
Sin embargo, el conjunto visitante reaccionó y, tres minutos después, Atencia, por bajo, recortó distancias (2-1), llegándose al descanso con este resultado.
Tras el paso por los vestuarios, la U.D. Coineña, por mediación de Heredia, que aprovechó un pase de Atencia, estableció el empate, aunque dos minutos después, Pablo aprovechó una falta que sacó Barroso para desviar el esférico al fondo de la meta defendida por Álex Sánchez.
El cuadro visitante respondió cinco minutos después con un lanzamiento al larguero de Isaac.
En el 32’, un saque de esquina botado por Barroso lo aprovechó Kiko para poner el 4-2 en el marcador.
El conjunto visitante nunca se dio por vencido y siguió atacando a un Melistar que se defendía bien.
Sin embargo, a falta de 13” para el final del encuentro, Heredia cedió un balón a Atencia para que, a placer, subiese al marcador el 4-3.
Sólo era cuestión de mantener el balón, pero Román recuperó el esférico y, sobre la bocina, desde fuera del área, batió a Bilal con un fuerte lanzamiento, ante la mirada atónita de todos los aficionados que se dieron cita en el pabellón Javier Imbroda que no se creyeron lo que estaba pasando durante estos últimos segundos con el empate malagueño, llegándose al final del encuentro con el resultado de 4-4. Ahora lo más importante es resarcirse cuanto antes de este pequeño varapalo sufrido para centrar todos los esfuerzos en sumar el triunfo en la próxima jornada de competición liguera, para seguir cerca de los primeros lugares de la clasificación general dentro del grupo quinto de la Segunda División B del fútbol sala español