UGT-Melilla afirma que los datos de la comisión de expertos que proponen que el salario mínimo interprofesional (SMI) aumente hasta el 60 por ciento del salario medio "están desfasados", de manera que el sindicato plantea "la necesidad de que se redondee" para llegar a "una subida del SMI a 1.100 euros", en lugar de los 1.049 euros que propone la comisión.
"Si realmente queremos proteger a las personas que tienen menos y que no pierdan capacidad de compra, el salario mínimo debe crecer lo mismo que el coste de la vida", considera el sindicato, para el que es "previsible que la inflación se modere" y, por tanto, con una subida del 10 por ciento del SMI los trabajadores podrían ganar poder adquisitivo.
Asimismo, UGT ha vuelto a criticar que la patronal se levantara de la mesa para lograr un acuerdo salarial marco y ha lamentado que "los convenios continúan atascados", lo que anticipa tensión y conflictividad laboral a partir de septiembre.
Según el secretario general de UGT, Francisco Díaz, "los convenios no se están firmando de manera mayoritaria", lo que propicia las movilizaciones, si bien ha reconocido que los convenios que se firman lo hacen en mejores condiciones que los suscritos antes del mes de marzo.
Desde UGT-Melilla, señalan “el esfuerzo del sindicato en la mejora de los derechos de los trabajadores y en el acompañamiento que están haciendo para conseguir que este Gobierno vaya más allá cada año y garantice mejores condiciones laborales, salariales y prestaciones a las familias trabajadoras de este país”. A las movilizaciones de este miércoles le seguirán asambleas para incentivar el diálogo social y llegar a un acuerdo de negociación colectiva.
Justicia social
En opinión del secretario general de UGT, el SMI debe subir “por justicia social”, porque “las empresas pueden pagar el SMI”, pues “los sectores a los que afecta más” están “creciendo” y “están teniendo beneficios”.
Además, Díaz que se debe subir también “por eficacia económica”, dado que, “si no se sube el SMI, es difícil que España pueda superar esta situación de bajada del crecimiento económico”. En este sentido, ha señalado que una persona que pasa de cobrar 1.000 euros a 1.100 euros "con toda seguridad" lo va a invertir en consumo.