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La Dirección General de Tráfico (DGT) lleva a cabo esta semana una campaña para intentar reducir el número de accidentes que tienen las furgonetas y los camiones.
En una nota de prensa, informó de que, después del turismo, es el tipo de vehículo más numeroso en circulación y que tiene una antigüedad de más de doce años.
Más de 500 personas mueren al año en accidentes en que están implicados furgonetas y camiones. Representan el 16% del parque y sufren también un 16% de los accidentes con víctimas en las carreteras.
Se vigilará la velocidad, drogas y alcohol, distracciones, horas de conducción y descanso, tacógrafo, exceso de peso, seguridad de la carga y documentación, en general.
Las cinco unidades móviles de ITV que la DGT puso en funcionamiento en octubre pasado han detectado irregularidades en 1.135.
Los agentes, además, inspeccionarán aquellos camiones de reciente adquisición que pudieran estar realizando manipulaciones en sus motores (Adblue) para anular la acción tecnológica reductora de gases de combustión. Se trata de un aditivo que se almacena en un depósito diferente al de gasoil, que se encarga de reducir la carga contaminante del óxido de nitrógeno (Nox). El uso de este componente químico da cumplimiento a las normas europeas sobre la reducción de gases contaminantes.