Este domingo el rock hizo acto de presencia en la ciudad con las jornadas de convivencia que se han llevado a cabo en el salón de celebraciones del Vº Pino. Aprovechando que la vacunación está dando cierta tregua con la pandemia, este domingo se celebró una jornada de convivencia en la que la música ha sido la protagonista.
Muchas familias y grupos de amigos de la música acudieron al salón de celebraciones del Vº Pino para poder disfrutar de este evento cuyos organizadores han sido también el grupo de música Dharma. Esta formación musical actúan este domingo en este evento familiar en el que actuaron también Durazzo Lupo, Molly Bloom, Coto Privado y Skell.
Desde las 13:00 horas a las instalaciones se fueron aproximando numerosas personas con su entrada para poder presenciar esta jornada de espectáculos y convivencia. Nacho Mirambell, cantante y guitarrista de Dharma, explicó a El Faro que la idea surgió viendo que se está consiguiendo un poquito más espacio para las personas, ya que hay mucha gente vacunada, por eso optaron finalmente por organizar esta jornada de convivencia.
“Como el V Pino nos daba esa opción de hacer un evento de gran tamaño un espacio amplio con zona exterior y con protocolo covid, decidimos hacer las pesquisas necesarias y esto es lo que ha salido, una jornada de convivencia con música”, comentó. Además, aseguró que todas las personas asistentes estaban advertidas de que no podían moverse de mesa, ya cumpliendo con todo ello, está satisfecho “de que suene la música por fin”.
Todo fue organizado con un protocolo, y los asistentes, con las entradas numeradas, se iban sentando en las mesas que se le habían asignado de forma previa.
Para los asistentes este evento familiar, en el que hubo personas de todas las edades, es un respiro y vieron con muy buenos ojos esta iniciativa. Para Marina este tipo de evento era una novedad, le llamaba la atención, y dio el visto bueno. Su acompañante, Edmundo, señaló que Melilla estaba muy “aburrida” y que por todo lo ocurrido los melillenses estaban “aisladísimos”. “Tendríamos que fomentarlo fin de semana tras fin de semana”, sugirió.
Por su parte, Carlos, otro asistente, también estaba muy contento de poder asistir a las jornadas. “Hacía tiempo que hacía falta ver ya un poco de conciertos buenos y vamos a pasarlo bien esta tarde, que es lo que interesa”, comentaba.
Además, un hecho a destacar es que los artistas que han participado son todos de Melilla, y la ciudadanía está orgullosa de poder disfrutar de este producto local. “Eso es lo importante, que son locales, tenía muchas ganas de eso porque ellos llevaban pidiendo también desde hace mucho tiempo poder dar un concierto a su gente”, decía Carlos.
En este caso, era Durazzo Lupo quien abría estas jornadas haciendo un poco de ‘freestyle’, y después finalizaría, por la tarde después de la comida, con las tres bandas de rock de la ciudad, Dharma, Coto Privado y Skell.
Ahí todos los presentes disfrutaron de este evento familiar que abre de alguna manera la temporada de verano y en el que tuvo cabida el rock el hip-hop y el metal melillense.
