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Marín destacó que también se comprará una cámara térmica y una nueva iluminación que permitirán dar un salto importante en materia de seguridad para evitar la entrada de personas a esta zona comercial
El presidente de la Autoridad Portuaria de Melilla, Miguel Marín, presentó ayer un gran número de proyectos que ayudarán a mejorar las instalaciones de esta entidad. Entre ellas, se llevarán a cabo varias medidas para aumentar la seguridad. En este sentido, se va a adquirir una valla nueva antiintrusión para evitar que las personas entren en la zona del puerto comercial.
De esta forma, se pasará de los dos metros de valla a los cuatro y terminará en ‘Y’ para poner mas dificultad que se pueda saltar. Es más alta que la anterior, porque se pasa de dos a cuatro metros.
“Se pretende mejorar de forma considerable la seguridad en el puerto comercial de Melilla y dotar de mejores medios a los profesionales que realizan su labor en estas instalaciones”, aseveró Marín. Se cambiarán casi 600 metros lineales de alambrada, es decir, todo el antiguo paseo. Además, la inversión que se llevará a cabo será de 493.974 euros.
Florentina
Al mismo tiempo que se desarrolla este proyecto, la entidad llevará a cabo otra actuación en la zona de la Florentina. El presidente de la Autoridad Portuaria comentó que en la parte previa al paseo del espaldón hay unas pequeñas vallas que “no están obteniendo un buen resultado para defender el perímetro frente a intrusiones”.
Marín indicó que se van a sustituir estas alambradas por otras que serán especiales para evitar que se puedan colar por ahí personas. En este proyecto se invertirán 52.000 euros para una superficie de más de 30 metros lineales.
Cambio en la iluminación
También será “muy eficiente” a nivel de seguridad, según el presidente de la Autoridad Portuaria, la instalación de una nueva iluminación en el paseo del espaldón. Esto mejorará el trabajo que está desarrollando el personal de seguridad, afirmó.
Marín señaló que estos cambios supondrán la reserva de una partida de 63.000 euros. Aseveró que la iluminación que había en esta zona estaba muy deteriorada por los actos vandálicos de las personas que “deambulan” por este paseo.
El presidente del Puerto subrayó que con todos estos cambios se convertirá en un espacio “inaccesible” para estos ciudadanos.
Una cámara térmica
Por otro lado, Marín indicó que se va a adquirir una cámara térmica que se instalará en la zona del faro de Melilla La Vieja para que, a través de ella, se pueda ver la actividad que se desarrolle tanto en el paseo del espaldón como en la escollera. “Es donde se producen el mayor numero de intrusiones”, señaló el presidente del Puerto.
Esta cámara estará al servicio del personal de seguridad y podrá detectar qué está pasando por la noche en estos espacios. Para ello, esta institución invertirán alrededor de 35.000 euros.