La Policía Nacional está encontrando más vecinos que se resisten a cumplir la cuarentena en el barrio de La Cañada de Hidum que en el resto de la ciudad, según explicaron fuentes del cuerpo. Desde que se decretó la cuarentena para frenar los contagios por el COVID-19, la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local se patrullado las calles de la ciudad para advertir a los ciudadanos de las nuevas medidas: no se puede salir de casa a excepción de casos puntuales, como ir a trabajar o a hacer la compra. Aún así, dichas fuentes comentaron que llegaron a parar a una mujer en bicicleta que se excusó en que iba a comprar el pan y aunque aún no se han publicado los datos, la mayoría de las personas obedecen cuando se les pide que vuelvan a sus hogares, pero hay individuos que se resisten, por lo que muchas de las denuncias que se están poniendo es por “desacato a la autoridad”, contaron. Este martes, sin ir más lejos, una persona fue detenida en el barrio de Tiro Nacional por este motivo.
Estado de Alarma
Desde que inició la cuarentena, los agentes deben remitir sus actuaciones a las subdelegaciones del Gobierno, si es posible con reportaje fotográfico. Fuentes de Interior indicaron que los agentes de los diferentes cuerpos actuarán siempre desde el principio de proporcionalidad.
Desde el Gobierno aseguran que en el decreto no se ha hecho especial énfasis en el régimen sancionador, ya que las condiciones de la declaración del estado de alarma no responden a un escenario de disturbios o conflicto en la calle. El Ejecutivo confía en el civismo y la responsabilidad de la ciudadanía, por lo que no se ha querido regular al detalle las posibles sanciones, que quedan limitadas a lo previsto en la ley sobre el estado de alarma de 1981 y su concreción en la Ley de seguridad ciudadana.
Es una crisis sanitaria y no de seguridad, insisten desde el Gobierno, por lo que las sanciones por el incumplimiento de las normas decretadas se tratarán conforme a las leyes ordinarias que ya contemplan delitos como el de desobediencia para los casos más extremos.
Las cabras siempre tiran para el monte