Ante FC Cartagena la UD Melilla sumó su quinto empate en la Liga, que coloca al equipo azulino en el quinto puesto de la clasificación. Los unionistas siguen sin conocer la derrota en lo que va de torneo.
No hay quinto malo. Así reza el dicho. La Unión Deportiva Melilla consiguió ante el equipo departamental su cuarto empate consecutivo, el quinto en las ocho jornadas que se llevan disputadas en el presente campeonato. Además, el equipo azulino es junto al CD San Fernando el quinto más goleador del Grupo.
De este modo la escuadra unionista, que encadena cuatro jornadas sin saborear las mieles del triunfo, sale de los puestos de playoff de ascenso, aunque a estas alturas de temporada la clasificación es solo un hecho anecdótico.
A pesar de llevar justo un mes sin ganar, las sensaciones que transmite el equipo sobre el terreno de juego no son precisamente para preocuparse. El equipo, juegue quien juegue, sigue fiel a su estilo de juego: Intercambio de golpes con el rival partiendo de una buena organización defensiva. El Melilla es en estos momentos el único equipo invicto del Grupo, para algunos eso es lo importante; aunque para otros, al igual que la clasificación, es simplemente una anécdota. Vuelvo a insistir, como hace una semana, que en una liga de tres puntos los empates tienen una relativa importancia. La tienen, no cabe duda, pero si más pronto que tarde el punto sumado se hace bueno con una victoria.
ADN melillense
De igual modo, y aunque a algunos les pueda fastidiar, hay que reconocer que hacía mucho tiempo que la UD Melilla no contaba con tan poca gente de la tierra. Eso es un hecho evidente e irrebatible. La pasada semana en San Fernando solo hubo un jugador canterano en el once titular; y esta semana frente al FC Cartagena más de lo mismo.
Nacho Aznar es el único que está jugando de inicio en estos momentos y esperemos que siga así mucho tiempo. Sobre todo después de ver cómo el canterano Pepe ha pasado de golpe y porrazo al ostracismo (ya ni entra en las convocatorias) y otro tanto parecido ocurre con Sufian. El único jugador que es capaz de dar algo de pausa al centro del campo, y que a pesar de haber desaparecido del once inicial sigue encabezando el trofeo al mejor jugador del equipo. Son datos que, guste o no, están ahí.Otra cosa es lo que ha ocurrido con Mahanan. El melillense y también capitán del equipo se cayó del once titular debido a una lesión, y ahora le toca esperar a que le llegue de nuevo su oportunidad. Cabe esperar entonces, que los anteriores se han podido caer por bajo rendimiento. ¿Alguien se lo explica?.
Libertad de opinión
La semana pasada fue bastante ajetreada por expresar de manera libre lo que uno piensa. Cuando no interesa la verdad se suelen tergiversar las cosas y entonces es cuando aparecen fantasmas inexistentes. Algunos, incluso miembro de la directiva, hasta invocan la presencia de determinado espíritu para intentar ganar el partido. Lo que pasa es que hasta para eso hay que saber a quien invocar. El citado espíritu apareció en el Álvarez Claro, pero se vistió de albinegro en lugar de azulino, para disgusto del susodicho. Tampoco hay que tomárselo todo a pecho y de vez en cuando viene bien algo de cachondeo, pero lo malo es que se convierta en pitorreo.
El presidente Luisma Rincón y su junta directiva están haciendo un buen trabajo. Algunas decisiones las comparto otras no, pero es la opinión de un simple aficionado y socio. Una figura (la del socio) que parece que tampoco pinta mucho este curso.
No es malo que el máximo responsable y su equipo quieran tenerlo todo atado y controlado, pero me da la impresión de que precisamente donde más descontrol tiene es en su círculo de colaboradores más cercano. Mal asunto sería que desde el club se apoyara posturas de radicales que atentan con la liberta de expresión. Da la impresión de que no se admiten notas discordantes en el coro. De "el que se mueva no sale en la foto". Esa táctica puede achicar a algunos, pero al que suscribe no. Seguiremos dando nuestra opinión independiente le duela a quien le duela.