Acsemel indica que el verano, en plena OPE, no es el mejor momento para acometer una actuación de este tipo. Apuntan que si el tránsito de Farhana se desvía a Beni Enzar los atascos aumentarán aún más.
Los comerciantes de la frontera temen las consecuencias del inicio de las obras del paso fronterizo de Farhana. El delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, anunció la semana pasada el arranque de la actuación en este puesto para hoy mismo. Las obras comienzan en plena Operación Paso del Estrecho (OPE) y desde Acsemel temen que las actuaciones provoquen un aumento aún mayor del tránsito por Beni Enzar.
Miles de personas se suman en estos meses al tránsito habitual de la frontera de Melilla con Marruecos debido a la OPE. Los atascos provocan las quejas tanto de los vecinos del barrio de El Real, que son los más afectados, como de los comerciantes de Beni Enzar, que critican que las colas para entrar y salir del país vecino se dejan sentir en sus negocios en una merma de las ventas. Ahora, con el inicio de las actuaciones en Farhana, los empresarios temen que el tránsito que habitualmente recoge este paso se traslade a Beni Enzar. Aunque por Farhana no pasan los viajeros de la OPE, el hecho de que los melillenses que utilizan este puesto para entrar a Marruecos cambien su rutina y se desvíen por el otro paso provocaría la aparición de más retenciones.
El responsable de Acsemel, Abdeslam Mohamed, aseguró ayer en declaraciones a El Faro que no entiende que la Delegación del Gobierno haya elegido el verano para realizar esta intervención, sabiendo que es una época en la que se produce mucho más tránsito en la frontera. El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ya dijo hace unas semanas lo mismo, criticando la elección del momento para la actuación, a pesar de celebrar el hecho de que se vaya a hacer una intervención de mejora que consideran necesaria.
El representante de los comerciantes de la frontera criticó, además, que no se les haya informado de cómo se va organizar el tráfico una vez que se inicien las obras. Consideró que podría haberse dado más actividad a otros de los pasos fronterizos de la ciudad como Barrio Chino o Marigüari para evitar que todo el paso de personas y vehículos se concentre en Beni Enzar.
Los comerciantes insisten en la necesidad de que Melilla cuente con unos puestos fronterizos más ágiles y que el tránsito sea más fluido. Recalcan la importancia que tiene para la economía local los marroquíes que vienen a comprar a nuestra ciudad y aseguran que las colas provocan que éstos desistan de entrar en Melilla.
Hay que recordar que precisamente para evitar el ‘caos’ en la frontera el delegado del Gobierno indicó en su momento que se esperaría a que las obras del lado marroquí de Beni Enzar hubieran terminado antes de iniciar la actuación en Farhana, una intervención que tiene un plazo de ejecución de seis meses, según dijo el propio El Barkani.
Desde Acsemel confían en que se dé una solución para que el inicio de esta actuación perjudique lo menos posible a sus comercios.