Las ocho semanas de baja por paternidad serán una realidad si se aprueban los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del Gobierno de Pedro Sánchez. La responsable de la Unidad Contra la Violencia de Género de la Delegación del Gobierno de Melilla, Elena Fernández Treviño, puso en valor esta medida y explicó que éste sería el primer paso, dado que el objetivo es que en 2020 suba a 12 semana y en 2021 se llegaría a las 16 semanas, igual que la madre.
“Hablamos de un permiso de 16 semanas intransferible y remunerado para cada persona progenitora, independientemente de su sexo y de su tipo de familia”,informó. Y es que, en palabras de Fernández Treviño, “no puede haber igualdad ni en el empleo ni en las familias mientras los hombres sigan siendo ayudantes eventuales en los cuidados cuando sus ocupaciones laborales se lo permitan o mientras ellas siempre tangan sensación de riesgo de ausencia laboral porque tienen que ocuparse en la mayor parte de las tareas que tienen que ver con el cuidado de los hijos”. “Los permisos igualitarios son un instrumento crucial para ayudar a superar esos modelos un poco obsoletos de modelo de familias que ya no deberían darse”, señaló la responsable de la Unidad Contra la Violencia de Género.