Su implantación traerá mejoras sustanciales en el Juzgado de Guardia y el Registro Civil.
La implantación de la nueva Oficina Judicial de Melilla estaba prevista para principios de abril del próximo año, pero la adjudicación y ejecución de las obras a acometer en la Torre Norte del V Centenario retrasará la puesta en marcha a mayo, tal y como adelantó ayer a El Faro el juez decano de Melilla, Emilio Lamo de Espinosa. Los planos que los arquitectos presentaron el pasado mes de octubre ya están aprobados por el Ministerio y están listos para su salida a concurso. Las obras, que traerán mejoras sustanciales en el Juzgado de Guardia y en el Registro Civil, se ejecutarán en un plazo estimado de dos meses. De ahí, el inesperado retraso.
Nuevos aseos y calabozos
El Juzgado de Guardia verá mejorados los calabozos. Actualmente hay cinco, uno de ellos se habilitará a modo de despacho para que los abogados puedan hablar con sus clientes en privado antes de comparecer ante el juez. Pero el resto de las celdas se redistribuirán para que siga habiendo cinco. Además, se colocará nuevas puertas en los calabozos, homologadas por la Unión Europea y siguiendo las indicaciones que en su día hizo el Defensor del Pueblo, pues actualmente “las puertas” que tienen los calabozos son de barrotes.
Además, se mejorará la ventilación de los calabozos y del resto de dependencias del Juzgado de Guardia, según explicó a este diario Lamo de Espinosa. En el Registro Civil se construirán aseos, uno de ellos adaptado para personas con discapacidad.
Se trata pues de mejoras que han sido constantemente reivindicadas desde Melilla al Ministerio de Justicia y que ahora han sido escuchadas e incluidas en la reforma interna que sufrirán los juzgados melillenses para la implantación de la Oficina Judicial. En este sentido, el juez decano destacó “la sensibilidad” del Ministerio con estas reivindicaciones.
La implantación de la Oficina Judicial en Melilla provocará el traslado de los dos juzgados del Contencioso–Administrativo que ahora están en el Paseo Marítimo. Todos los juzgados se centralizarán en la Torre Norte del V Centenario, de ahí que sean necesarias algunas obras, pero que, según Lamo de Espinosa, no afectarán a la actividad diaria judicial.
Hace algunas semanas se implantó la Oficina Judicial en la ciudad de Ceuta, pero el juez decano afirma que el modelo caballa es muy diferente al de Melilla. Afirma que es más parecido a la Oficina Judicial de Mérida o Cuenca y ambos “funcionan muy bien”, por lo que Lamo de Espinosa tiene muchas esperanzas de que este proyecto tenga buenos resultados en nuestra ciudad también. Además, dado que el proyecto se concibió en 2010 y se ha implantado en otras ciudades, Melilla parte con ventaja para salvar los errores cometidos en otras ciudades y así mejorar la implantación y rodaje de la Oficina Judicial en la ciudad.
Redistribución de los espacios en la Torre Norte
Con la implantación de la Oficina Judicial, los diferentes juzgados de Melilla cambiarán de planta, pero ello se debe a que los Servicios Comunes “se comerán” la mayor parte del espacio disponible así como de los recursos humanos. Habrá tres áreas perfectamente diferenciadas y en las que se centralizará la principal actividad del juzgado. Por una parte, está el Servicio de Entrada de Documentos, donde se recepcionarán y tramitarán las demandas y denuncias. El Servicio de Notificaciones se encargará de “salir a la calle” para entregar en persona citaciones o sentencias. En tercer lugar, estará el Servicio de Ejecución, que como su propio nombre indica, será el encargado de ejecutar las resoluciones y sentencias de los jueces.
Estos Servicios Comunes estarán dirigidos en cada área por un secretario judicial, que velará por el correcto funcionamiento de cada servicio para que éste se preste con agilidad. Además, a estos servicios comunes irán destinados gran parte de los funcionarios de la Administración de la Justicia en Melilla.
Los juzgados se convertirán en Unidades Procesales de Apoyo Directo (UPAD) y estarán formadas por el juez titular, un secretario judicial y un número de funcionarios más reducido que el actual.
En la nueva Oficina Judicial, el juez únicamente se tendrá que preocupar de celebrar juicios y poner las sentencias, puesto que la mayoría de los trámites que deben hacer actualmente se derivarán a los Servicios Comunes, agilizando así la administración de la justicia.