Mandos de la Guardia Civil y Policía Nacional se reunieron con Acome, una naviera y representantes de los comerciantes de la zona de la frontera en la Delegación del Gobierno para hablar sobre horarios y controles.
Las autoridades aduaneras de Marruecos están detrás del “excesivo celo” y los “horarios arbitrarios” en los pasos de Beni Enzar y Barrio Chino de los que tanto se quejan los comerciantes de la zona de frontera. Así salió a relucir en una reunión celebrada en la Delegación del Gobierno hace aproximadamente unos diez días.
En representación de los ‘damnificados’ de la frontera asistieron al encuentro representantes de la Asociación de Comerciantes de Melilla (Acome), de los empresarios del entorno de la Avenida de Europa y una naviera afectada por la acumulación de contenedores en el puerto debido a que si la mercancía no puede salir por la frontera, ésta se queda almacenada.
De la otra parte, la de las autoridades, estaban el comisario de la Jefatura Superior de Policía, José Ángel Jiménez, cuatro altos mandos de la Guardia Civil, entre ellos el coronel de la Comandancia de Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor, y el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani.
Según han explicado los comerciantes en declaraciones a El Faro, sobre la mesa se pusieron varias cuestiones. Entre ellas, los cierres de Barrio Chino, el veto al tráfico de mercancías los sábados y los controles exhaustivos a los porteadores en Beni Enzar.
Respecto a este último tema, desde la Benemérita aclararon a los comerciantes que si en los últimos días sólo se está permitiendo pasar alimentos a Marruecos es porque las autoridades del país vecino así lo han decidido.
Si Marruecos no quiere...
La Guardia Civil explicó a los comerciantes que no permite sacar de Melilla otro tipo de mercancías que no sean alimentos porque eso haría que Marruecos devolviera a la persona que intenta entrar en el país vecino con otros productos. La devolución, insistieron, provocaría un caos en los accesos a la ciudad al sumarse los porteadores rechazados por la aduana marroquí a la cola de entrada a Melilla.
También recalcaron que los cierres que se han registrado en Barrio Chino no responden a un capricho de la Guardia Civil sino a una decisión de Marruecos, que es soberano y ha decidido que en Ramadán si permite el paso de porteadores, lo hará por las mañanas.
En definitiva, la Benemérita destacó en la reunión mantenida con los comerciantes en la Delegación del Gobierno que el Instituto Armado se limita a colaborar con la aduana marroquí para evitar que las personas entren y luego sean devueltas a España.
Además subrayaron que en España no hay ningún problema con el paso de mercancías al país vecino porque se trata de productos que han pagado en Melilla los impuestos correspondientes, bien sea en la aduana o a través del IPSI incluido en las facturas, pero “si Marruecos no quiere, no quiere”.
Además, las autoridades recordaron a los comerciantes que no hay ningún acuerdo escrito sobre cómo debe funcionar la frontera. Así que en principio la solución está en manos de Marruecos.
No obstante, dieron esperanzas a los comerciantes de la frontera. En la reunión se volvió a hablar de que ha sido el país vecino el que ha solicitado la apertura de un quinto paso fronterizo, que en teoría estará entre Barrio Chino y Beni Enzar.
También les aseguraron que en cuanto terminen las obras del principal paso fronterizo de la ciudad, el tráfico de mercancías recobrará cierta normalidad.
En lo que no hay marcha atrás es en la limitación del ‘comercio atípico’ de lunes a viernes. El veto al tráfico de mercancías de los sábados continuará durante toda la la Operación Paso del Estrecho (OPE) y los comerciantes de Acome lo han asumido.
Depende, sobre todo, de los marroquíes
Comerciantes que estuvieron en la reunión de hace unos diez días en la Delegación del Gobierno han comentado a El Faro que salieron del encuentro con la sensación de que la solución al problema de la frontera depende de todos, pero sobre todo, de Marruecos. “En España no hay ningún problema. Es Marruecos y si no quiere, no quiere”, comentaron a este periódico.
Los comerciantes representados por Acome tienen claro que la solución al problema del tráfico de mercancías hacia Marruecos pasa por el equilibrio entre todas las partes, incluido el país vecino.
También apuntaron a este periódico que han asimilado el cierre puntual del paso de Beni Enzar al tráfico de mercancías los sábados, porque entienden que la frontera es de todos, también de los melillenses que quieren hacer turismo los fines de semana y que merecen encontrar menos atascos en la frontera.
Además, reconocen que la medida facilita el trasiego de vehículos durante la Operación Paso del Estrecho y también con motivo del mes sagrado de ayuno del Ramadán.
En todo caso, los comerciantes salieron de la reunión con los mandos de la Guardia Civil y de la Policía Nacional con la esperanza de que terminen pronto las obras del principal paso fronterizo de la ciudad.
Aunque desde la Delegación del Gobierno se dijo que los trabajos iban a acabar antes del 15 de junio, finalmente no ha sido así. Las colas, de momento, no han atascado la frontera por la bajada de pasajeros de la OPE.
A la Delegación no le consta que la frontera tenga “horarios arbitrarios”
A la Delegación del Gobierno no le consta que haya “horarios arbitrarios” en la frontera de Beni Enzar como asegura Abdeselam Mohamed Mimun, presidente de una nueva asociación de comerciantes creada en Melilla (Acsemel). En cualquier caso deja la puerta abierta a que sean Policía Nacional o Guardia Civil los que se pronuncien al respecto.
Sí admiten desde el departamento de Abdelmalik El Barkani que hace unos días se celebró un encuentro con comerciantes y mandos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La reunión se convocó, según explicaron ayer a El Faro, para informar a los empresarios de que se prohibiría el tráfico de mercancías los sábados por Beni Enzar durante el tiempo que dure la Operación Paso del Estrecho.
También avanzaron a El Faro que el encuentro sirvió para hacer “una puesta en común” y repasar la situación de la frontera.
Acome no quiere polémica
Desde la Asociación de Comerciantes de Melilla (Acome) no quisieron entrar ayer a valorar el “vacío” que según el presidente de Acsemel existe a la hora de defender los derechos de los empresarios de la frontera.
Una prueba de que esta situación no es exactamente así es la reunión celebrada hace unos diez días en la Delegación del Gobierno, a la que asistió el presidente de Acome, Enrique Alcoba, junto a representantes de los empresarios de la frontera y de una naviera afectada por la acumulación de contenedores en el puerto.
Alcoba insistió en que no tiene sentido entrar a polemizar, pero recalcó algo que ha venido repitiendo desde hace mucho tiempo, que la mejora de la frontera es buena no sólo para los comerciantes sino también para todos los melillenses y nadorenses en general.
Hay que recordar que Alcoba sí ha estado en todas las reuniones celebradas desde octubre pasado tras las movilizaciones de los comerciantes de la frontera, en cuanto se prohibió el paso de porteadores por el principal paso fronterizo de la ciudad y se desvió el tráfico de mercancías al paso de Barrio Chino.
De hecho, se le puede atribuir al presidente de la Asociación de Comerciantes y a los empresarios de la zona de la frontera que hayan conseguido que la medida diera marcha atrás, ya que poco después se habilitó un paso para porteadores por la zona por donde antiguamente se aparcaban los coches de la Policía y los vehículos decomisados en la aduana.