La Consejería de Igualdad y Mujer ha presentado este lunes el cortometraje 'Mi marido sale de trabajar a las seis'. Una producción audiovisual que busca sensibilizar y prevenir la violencia machista entre los jóvenes. El vídeo, dirigido por Óscar Toribio y protagonizado por los actores melillenses Alejandra Acedo y Fran Antón, se proyectará próximamente en todos los centros educativos de secundaria de la ciudad autónoma, acompañado de talleres y debates para fomentar la reflexión entre el alumnado.
Durante la presentación, la viceconsejera de Igualdad, Fadwa Abdelhadj, ha subrayado que este trabajo nace del “compromiso firme de la Consejería de Igualdad y Mujer del Gobierno de Melilla con la erradicación de la violencia machista”. En su intervención, ha destacado la importancia de emplear todas las herramientas posibles para concienciar a la sociedad.
“El arte y la cultura son unos valiosísimos instrumentos. Captan la atención de los más jóvenes y remueven emociones profundas donde a veces el discurso no llega”, ha señalado.
El título del corto, Mi marido sale de trabajar a las seis, encierra una realidad dura y cotidiana. Según ha explicado Abdelhadj, “refleja una rutina aparente de muchos hogares donde cada día, detrás de las puertas cerradas, se esconde un gran monstruo. Se esconde el miedo, el control y mucho sufrimiento”. En este sentido, el proyecto busca no solo visibilizar a las mujeres que sufren violencia, sino también poner el foco en los menores que crecen en ese entorno.
“Este gran proyecto quiere dar visibilidad a las víctimas, pero sobre todo poner el foco en quienes a menudo quedan en un segundo plano, los hijos e hijas que crecen en un entorno de violencia machista”, ha señalado la viceconsejera. “Queremos recordar que la violencia machista no termina en la pareja. En la mujer deja heridas profundas y difíciles de curar en toda la familia. Y muy especialmente en los menores, ellos también son víctimas”.
Abdelhadj ha advertido que estos niños y niñas “desgraciadamente, por las situaciones vividas, lo más probable es que tengan problemas a lo largo de su vida: baja autoestima, depresión, dificultad para socializar, sentimiento de culpa o incluso convertirse en agresores o víctimas en relaciones futuras”. Por eso ha insistido en la necesidad de que las instituciones actúen. “Como sociedad, nosotros tenemos la obligación de protegerlos, de escucharlos y enseñarles a detectar estas violencias para garantizarles un futuro libre de violencias machistas”.
La viceconsejera ha agradecido al equipo creativo y técnico su implicación y sensibilidad a la hora de abordar un tema tan delicado. “Mi marido sale de trabajar a las seis no es un corto, es una llamada a la conciencia social. Desde el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla seguiremos impulsando y apostando por proyectos que eduquen, que sensibilicen a nuestros pequeños y pequeñas para que las nuevas generaciones crezcan sanas y libres de violencias machistas”.
Tras su intervención, Abdelhadj ha cedido la palabra al director del cortometraje, Óscar Toribio, quien ha explicado que el proyecto nació con la intención de servir como herramienta educativa en los institutos. “El proyecto nace sobre todo para poder prevenir la violencia machista en los institutos y que se eduque en determinados tipos de valores”, indicó.
Toribio ha explicado que el cortometraje busca transmitir un mensaje claro a los jóvenes: “El amor no es tener miedo”. “Mi marido sale de trabajar a las seis es una historia en la que Alejandra Acedo y Fran Antón son hermanos. Vais a ver que en el corto se va a generar bastante ansiedad en lo que es la imagen, y lo que está haciendo el corto es sensibilizar a los jóvenes, prevenir lo que se dice en esas tempranas edades, que tienen sus primeras relaciones de pareja, y que en esas relaciones no se repitan patrones”, explicó el director.
El cortometraje, de unos once minutos de duración, se caracteriza por una atmósfera opresiva que refleja la angustia y la dependencia emocional de la protagonista. Su discurso al explicarle a su hermano lo que le pasa está lleno de justificaciones hacia su marido, muestra con crudeza la manipulación y el control psicológico que sufre. Un tipo de violencia invisible que muchas veces pasa desapercibido. A través de esta historia, el corto busca que los jóvenes reconozcan comportamientos de control o dominación en sus propias relaciones o en su entorno cercano.
“Lo que se pretende hacer con este corto es escarbar y crear conciencia social”, añadió Toribio.
La viceconsejera ha insistido en que el arte es una herramienta muy eficaz para llegar a los jóvenes. “A veces, con el discurso se aburren o no prestan atención. Entonces este tipo de actuaciones les llega, porque luego, después de ver ellos el cortometraje, se hace como una especie de taller donde se puede hacer un debate. Y de ahí, os aseguro que muchas veces se detecta que en algunos hogares se vive esa violencia machista”.
Fadwa ha destacado que este proyecto se complementa con las acciones educativas que ya desarrolla el Gobierno de Melilla en materia de coeducación. “Nosotros no solamente actuamos desde el Gobierno de Melilla con el arte o con un teatro, sino que también lo hacemos en los centros educativos, tanto de primaria como de secundaria, con nuestro programa de coeducación. Esto es un complemento: el arte es un complemento, la cultura es un complemento para llegar a los más pequeños”, explicó.
En la presentación también se han abordado aspectos técnicos y organizativos del proyecto. Abdelhadj ha confirmado que la Ciudad Autónoma ha financiado íntegramente el cortometraje, con un presupuesto de 14.000 euros en un contrato menor. Además, aclaró que la Dirección Provincial de Educación ha aprobado su proyección en los institutos de secundaria, ya que la crudeza del tema lo hace inadecuado para edades más tempranas.
“Cada vez que nos presentan un proyecto lo estudiamos en la Consejería de Igualdad y Mujer. Luego, para poder proyectarlo en los centros educativos, tanto en primaria como en secundaria, lo ofrecemos a la Dirección Provincial para que lo estudien y valoren si es válido para ese alumnado. En este caso, entendieron que sí”, señaló.
Asimismo, la viceconsejera ha explicado que en las proyecciones habrá un agente de igualdad de la Ciudad Autónoma, además del que ya tiene cada instituto, para acompañar las sesiones y los talleres posteriores.
Por último, Abdelhadj ha recordado que la Consejería de Igualdad y Mujer desarrolla a lo largo del año numerosas actividades y talleres, no solo en fechas señaladas como el 25 de noviembre o el 8 de marzo, sino de manera continua. “Hace dos semanas hicimos un teatro infantil dirigido a Primaria en la calle O’Donnell Este tipo de actividades se hacen periódicamente y son adaptadas a las distintas edades”, apuntó.
Con Mi marido sale de trabajar a las seis, Melilla apuesta una vez más por el arte como vía de educación y transformación social. Un corto que no busca entretener, sino conmover, cuestionar y abrir los ojos ante una realidad que sigue presente en demasiados hogares. Porque, como recordó su director, “el amor no es tener miedo”.








