Miranda destaca que en este curso se han dado 1.475 ayudas a escolares para comprar libros.
Es la primera vez que la Ciudad reserva una partida presupuestaria para hacer frente a las solicitudes de ayudas de las familias necesitadas para la compra de material escolar de los niños de Educación Infantil. La Consejería de Educación contará con 125.000 euros para echar una mano a estos padres y evitar que los niños de tres a cinco años vaya al colegio sin los materiales que necesitan para la clase. Esta misma cantidad fue la que se invirtió el pasado año en ayudas a los alumnos de Infantil en riesgo de exclusión social, aseguró el consejero de Educación, Antonio Miranda, que resaltó que si la demanda fuera más elevada que en 2013, se cubriría esta necesidad con parte de la partida que hay para la compra de libros de texto de Primaria.
El consejero de Educación informó de que a los 125.000 euros hay que sumar 325.000 euros que servirán para adquirir los materiales que hacen falta en los colegios que cuentan con el sistema de reposición de libros. Este año, con el cambio de normativa en Educación, se comprarán los libros de texto de primero, tercero y quinto de Primaria de todos los centros. En concreto, se adquieren por parte de la Consejería los de Lengua, Matemáticas y Conocimiento del Medio, sólo que para este año esta asignatura estará dividida en dos y serán dos los ejemplares que habrá que adquirir, añadió.
Muchas ayudas
Ayer, tanto el consejero de Educación como el director provincial de Educación tuvieron una reunión con todos los directores de los centros de Primaria para explicarles cómo solicitar estos libros y las ayudas que se van a ofrecer a las familias para que los costes de la vuelta al cole no sean tan elevados.
Miranda explicó que en el curso 2013-2014 se beneficiaron del sistema de reposición de libros unos 5.107 escolares. Además, se compró el material escolar a 487 niños de Infantil y a 968 alumnos de Primaria, lo que implica que 1.475 estudiantes de entre tres y doce años recibieron la ayuda de la Ciudad porque sus familias no tienen suficientes recursos económicos como para hacer frente a los gastos del inicio de curso. Lo que no precisó Miranda fue el número de escolares a los que la Ciudad les pagó de forma íntegra tanto los materiales como el resto de libros que no entran en el sistema de reposición de los centros.
Por otro lado, destacó que como el pasado año, la ayuda para la compra de material que ofrece la Ciudad se gestionará directamente desde los colegios. Los educadores y trabajadores sociales de los centros harán un informe sobre la familia que solicita esta ayuda y certificará que está en situación de pobreza. Sólo las que cuenten con el informe recibirán la aportación económica para hace frente al pago de los libros de texto y el material escolar.
Aunque este año hay una novedad respecto a estas ayudas. Los alumnos a los que la Ciudad les pague de forma íntegra el material y los libros para las clases no podrán acceder a una beca de 105 euros que todos los años oferta el Ministerio de Educación. La Dirección Provincial de Educación contará con el listado de los estudiantes a los que la Consejería ha comprado todo el material y de esta forma, quedarán excluidos de esta ayuda del Ministerio.