Se llevaron a cabo cuatro actuaciones independientes en los controles de embarque de pasajeros. La mayor cantidad de droga, 20 kilos, se halló oculta en un vehículo.
La Guardia Civil de Melilla ha realizado en los últimos días cuatro actuaciones contra el tráfico de drogas en el puerto y el aeropuerto de la ciudad autónoma, todas ellas durante los registros de seguridad que se llevan a cabo a los vehículos y personas que embarcan rumbo a la península.
La realizada en el aeropuerto tuvo lugar el pasado 12 de noviembre. El vigilante de seguridad del filtro de control de pasajeros realizó un cacheo superficial a un viajero que se disponía a embarcar con destino a Málaga. Durante el examen detectó “una anomalía” en su entrepierna. Los guardias civiles de servicio, tras realizar un completo reconocimiento del pasajero en un lugar habilitado para registros de este tipo, encontraron ocultos bajo su ropa interior y adosados con cinta adherente, diez paquetes envueltos en globos infantiles que contenían 986 gramos de polen de hachís. El detenido es un joven melillense, de nacionalidad española y 23 años.
En lo que se refiere a las actuaciones en el puerto, tres de ellas se realizaron el pasado 9 de noviembre. La primera tuvo lugar cuando se registró una furgoneta de la marca Renault, modelo Kangoo, ocupada sólo por su conductor. Los los canes del Servicio Cinológico mostraron indicios de que el vehículo tenía ocultos estupefacientes. Los agentes localizaron en los huecos del salpicadero y en los mecanismos del limpiacristales un total un total de 20,8 kilogramos hachís. El conductor fue detenido en el acto. Se trata de un francés de 34 años que atiende a las siglas de K.J.
Las otras dos intervenciones se produjeron gracias “a la inestimable colaboración de los vigilantes de seguridad” que realizan su labor en los controles de embarque a las personas que acceden al buque a pie.
Los vigilantes sospecharon de dos pasajeras por sus claras muestras de nerviosismo. Dieron inmediato aviso a la Guardia Civil, que procedió al registro de las viajeras. Durante su tarea, encontraron adosados a sus cinturas y tobillos un total de cuatro kilogramos de polen de hachís.
Las dos detenidas son de nacionalidad marroquí y residentes en la ciudad autónoma. Atienden a las iniciales S.J. y N.S y tienen 39 y 20 años de edad respectivamente.
La última actuación tuvo lugar el 11 de noviembre, también en el control de pasajeros. Los guardias civiles, tras cachear a T.B.M, joven melillense, de nacionalidad española, de 18 años, hallaron ocultos en sus zapatillas y bajo la ropa interior que vestía 2,2 kilogramos de hachís.
Los detenidos junto a la droga y el vehículo donde se transportaba oculta han pasado a disposición de la autoridad judicial como presuntos autores de un delito contra la salud pública.