Ayer inauguró su nueva sede situada en la calle Ejército Español número 7 en el piso 1º izquierda.
La Asociación Red Madre ha atendido en lo que va de año a catorce mujeres embarazadas. Un número alto en comparación con el del pasado año, según explicó la presidenta de esta entidad, Marta Uclés. Desde su fundación hace tres años, han ofrecido asesoramiento a 40 embarazadas. Ayer un grupo de voluntarios inauguró la nueva sede de esta entidad, desde donde podrán ofrecer su ayuda a más mujeres que lo necesiten.
En la apertura de este local estuvieron la consejera de Bienestar Social y Sanidad, María Antonia Garbín, el viceconsejero de Bienestar Social y Sanidad, Hassan Driss y la viceconsejera de la Mujer, Fadela Mohatar. Los tres pudieron comprobar que ningún espacio es desaprovechado en este piso situado en la calle Ejército Español número 7.
Red Madre destina una de las habitaciones a almacenar todos los aparatos que utilizan los bebés, desde sillas, a cunas o bañeras, otra de las salas es para la atención personal de las usuarias y en la última, también se cuenta con estanterías para guardar alimentos para los pequeños.
Uclés destacó que conseguir este local hubiera sido imposible para la asociación si no hubieran contado con la subvención que tanto el pasado año como éste les ha dado la Ciudad.
La titular de Bienestar Social y Sanidad explicó que Red Madre ha recibido este año 12.000 euros para costear el pago del alquiler de esta sede. Señaló la importante labor que desarrolla esta entidad que asiste a personas a un nivel al que no llega la Ciudad. Agradeció a los voluntarios de esta ONG su trabajo y dedicación con un colectivo muy sensible, como es el de las embarazadas.
Esta institución cuenta con el apoyo de un psicólogo y un ginecólogo que atienden a las usuarias de forma gratuita.
La soledad, el peor sentimiento
La presidenta de Red Madre indicó que a la asociación llegan muchas mujeres que no cuentan con el apoyo de sus parejas ni de sus familias. Afirmó que ellas se sienten solas y por eso la labor del voluntariado se centra en acompañarlas durante todo el embarazo y hasta que el niño tiene un año.
Informó de que en los últimos meses el perfil de mujeres que ha demandado su ayuda es el de una joven menor de 21 años. No obstante, apuntó que han llegado a asesorar a melillenses con casi 40 años.