A partir de hoy lunes, 25 de mayo, Melilla entra en una nueva fase de la desescalada, al igual que otra parte importante del territorio nacional. Queda muy claro que no nos hemos quedado atrás en ningún momento y todas las solicitudes que se realizaron al Gobierno de la Nación se cumplieron desde el punto de vista sanitario. Todos los informes, tanto del Ingesa como de la Ciudad Autónoma, sirvieron para demostrar que Melilla cumplía con los parámetros y, por tanto, esta tierra debía seguir adelante en las distintas fases de la desescalada.
La baja influencia de la pandemia, donde no se ha llegado a los doscientos contagiados, deja claro, de todas maneras, que ha sido una labor de todos. En primer lugar, de los melillenses, que son quienes han cumplido a la perfección, en la mayor parte de las ocasiones, las directrices emanadas por parte de las autoridades sanitarias. Y en segundo lugar el trabajo efectuado por parte de todos los que han tenido que trabajar en primera línea, fuera el sector que fuera.
Los continuos llamamientos a la responsabilidad por parte de toda la población han surtido efecto en los diferentes momentos de la pandemia. Por un lado, cuando se pedía el mayor confinamiento posible y solamente salir de casa para los estrictamente necesario. También cuando se dio a conocer que ya se podía salir a la calle, de manera paulatina, primeros los niños y después para la práctica deportiva, mayores o las familias. Las advertencias han tenido efecto porque se ha podido comprobar que el temido rebrote no se produjo.
A partir de hoy, seguirmos relajando las medidas de confinamiento y cada paso que sea da la responsabilidad por parte de los ciudadanos es cada vez mayor. Por tanto, continuemos en la buena senda cumpliendo, de manera principal, con ese distanciamiento social que es el nudo gordiano de toda la lucha que hoy en día se puede mantener contra el virus. En nuestras manos estará el conseguirlo