La UD Melilla se mide al CD San Roque de Lepe, a partir de las 12:00 horas en el Municipal Álvarez Claro, para afrontar el partido correspondiente a la décimo novena jornada del Grupo IV de Segunda División B.
El encuentro llega en un momento en el que ambos equipos atraviesan una racha positiva. Los azulinos encadenan siete jornadas sin perder en las que han cosechado dos victorias y cinco empates; mientras que los aurinegros lo hacen después de sumar de manera consecutiva en los últimos cuatro enfrentamientos ligueros en los que ha conseguido un triunfo y tres empates.
Así las cosas, el duelo se presenta interesante para dos equipos que tratarán de alargar su racha y seguir escalando posiciones en la tabla clasificatoria a pesar de que norteafricanos y andaluces afrontan el duelo mermados de efectivos.
Amarito es la única baja segura en el plantel unionista. El lateral zurdo melillense sigue con su puesta a punto tras su lesión en el tendón de Aquiles. Por otra parte habrá que ver cómo llegan los canteranos Hamin, Braim y Pendu, quienes han padecido en las últimas horas un proceso vírico. A todo ello hay que añadir las serias dudas en cuanto a su participación en el choque de Juanjo y Chota, aunque todo apunta a que ambos serán de la partida.
En cuanto al apartado de altas, Currás recupera para el importante choque de hoy al central Mahanan, tras cumplir el partido de sanción por acumulación de amonestaciones, y al exterior cordobés Guille Roldán, totalmente recuperado de sus problemas musculares.
Por su parte, el CD San Roque de Lepe se desplazó a nuestra ciudad con tan solo quince jugadores. Entre las ausencias que presenta la convocatoria del cuadro andaluz, la más significativa es la de su delantero centro Iván Aguilar, jugador que fue expulsado en el último encuentro disputado por los aurinegros en la vieja Condomina frente al UCAM, y que ha sido castigado con cinco partidos por el Juez de Competición.
La semana, como las últimas del año pasado, ha sido atípica para el conjunto que dirige el técnico gallego Fernando Currás. El plantel apenas ha podido ejercitarse sobre el escaso verde del municipal melillense debido a la resiembra a la que ha sido sometido. Una resiembra que todavía no ha dado sus frutos y que hace que el rectángulo de juego esté mucho peor que antes de los trabajos realizados. El equipo ha venido intercambiando varios escenarios de superficie sintética para completar los entrenamientos, con los riesgos que eso conlleva a la hora de sufrir determinadas lesiones, sobre todo musculares. La UD Melilla se mide a un rival al alza, situado justo en mitad de la tabla clasificatoria con 22 puntos con un partido menos que los azulinos, ya que el encuentro correspondiente a la décimo octava jornada que debió jugarse en el Ciudad de Lepe ante La Hoya Lorca quedó suspendido por intoxicación alimentaria de once jugadores del conjunto lorquino. Los leperos afrontarán el citado duelo el próximo 7 de enero, antes del comienzo de la segunda ronda del campeonato.
Además de la necesidad de los puntos en juego, los unionistas quieren romper con la serie de empates cosechados en los últimos partidos jugados en casa y hacer bueno el triunfo conseguido en tierras sevillanas en el último partido del año frente al Sevilla Atlético, y así permanecer fuera de los puestos de descenso directo en los que han estado ubicados durante casi toda la primera vuelta.
En cuanto al rival de hoy Fernando Currás indicó en la previa que “el San Roque empezó con muchas dudas o los resultados no le acompañaban, aunque sí que es verdad que es un equipo que mete muchos goles y los recibe. Hacen que los partidos sean abiertos. Juegan muy bien al contraataque y eso tiene un riesgo. No sé que partido veremos aquí, pero es un equipo que te hace estar siempre en alerta porque tiene futbolistas muy rápidos arriba y tienen bien trabajada la presión y el contraataque. Vamos a ver si somos capaces de imponernos e intentar jugar lo máximo posible en campo contrario y, sobre todo mantener esa solidaridad y esa fortaleza defensiva que creo es lo que nos está llevando a tener esa racha importante de partidos sin perder. Tenemos que intentar mantener lo bueno y buscar algo diferente de cara a la portería adversaria”.
Victoria en el último partido
El CD San Roque de Lepe saltará al municipal melillense tras despedir el 2014 en la vieja Condomina frente al líder del Grupo, el UCAM Murcia, ante el que consiguió un valioso empate (2-2) después de disfrutar de una clara ventaja en el marcador (0-2).
El Melilla ‘favorito’
El balance como visitante del próximo rival de la UD Melilla es de cinco derrotas, un empate y tres victorias. Las conseguidas frente al Arroyo (0-1), Córdoba B (0-2) y Marbella (0-2), precisamente en los tres únicos partidos en los que no ha encajado goles. Lejos del Municipal Ciudad de Lepe la escuadra andaluza ha sumado diez puntos de los 27 que ha disputado. En cuanto al bagaje goleador como foráneo, el San Roque ha conseguido perforar la meta adversaria en once ocasiones y ha visto perforada la suya dieciocho veces.
La UD Melilla y el CD San Roque se han medido en el Municipal Álvarez Claro en cuatro ocasiones, con un balance de tres victorias azulinas y una aurinegra. Eso sí, todos los marcadores fueron muy ajustados con triunfos por la mínima. La última visita del equipo andaluz fue en la temporada 2012-13 y el partido acabó con triunfo local (1-0). En la 2011-12 el Melilla se impuso 2-1 al igual que en la 09-10, mientras que el único triunfo del San Roque (0-1) se produjo en la 2010-11.