El Grupo Socialista tacha de “desastrosa” la gestión del ente público por construir viviendas cuyo precio “no es accesible para los melillenses”.
La última sesión plenaria de Control de la legislatura comenzó en la mañana de ayer con una Interpelación del Grupo Socialista sobre la creación de Viviendas de Protección Oficial (VPO) por parte de Emvismesa, en concreto sobre las ·dificultades económicas existentes para que cientos de melillenses puedan acceder a ellas”.
Así lo señaló el portavoz de los socialistas, Dionisio Muñoz, quien indicó que desde su formación política ya advirtieron sobre esta problemática, la cual “ha sido demostrada con el tiempo”, pues a día de hoy tan sólo se han vendido 25 de esas viviendas. En este sentido, matizó que de las 40 que señaló el Gobierno autonómico, quince de ellas no se han concedido por falta de crédito de los adquisidores.
Para Muñoz, la causa de estos hechos residía en el “elevado precio” de las VPOs, el cual se había visto encarecido por la política de Emvismesa de construir promociones en pequeñas parcelas de terrenos, una gestión que el líder del PSOE tachó de “desastrosa”.
“¿Hicieron ustedes cálculos cuando se crearon estas viviendas?”, apostilló, “han jugado construyendo como si fueran promotores privados, pero con el dinero de todos los melillenses”, destacó.
Y es que añadió que las condiciones impuestas por el ente público para acceder a una de estas viviendas es abonar un 20 por ciento del coste total como entrada, es decir, entre 20.000 o 30.000 euros. “Una persona que necesita un VPO no dispone de un dinero así”, protestó, “y la culpa es de Emvismesa por no preparar el suelo necesario”.
Como contestación a sus palabras, el consejero de Fomento, Rafael Marín, le indicó que ha sido el Gobierno socialista el que “no ha puesto ni un ladrillo en Melilla”, incumpliendo lo contenido en el acuerdo con el ya desaparecido Ministerio de Vivienda, que prometió crear 600 VPOs en la ciudad.
De igual modo, afirmó que la construcción en parcelas de pequeño tamaño no repercutió en el precio final de los pisos, ya que éste viene marcado en el Plan de Vivienda 2009 / 2011 con un precio máximo de 1.384 euros por metro cuadrado, mientras que Emvismesa lo rebajó a 1.334 euros.
No obstante, remarcó que hay otros elementos que sí influyeron en que muchas personas no pudieran acceder a estas viviendas, como la retirada de las ayudas a la entrada por parte del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.
“Algunos se han hinchado”
“La culpa la tiene siempre el Gobierno”, replicó Muñoz, “pero aunque se escuden ustedes en los argumentos de siempre, lo cierto es que algunos se han hinchado con las viviendas de Emvismesa”, apuntilló. En cuanto a la actitud del Ministerio de Vivienda , recordó que se formalizó el pago de 50 millones a la Ciudad Autónoma a cambio de que esta liberara terrenos, algo que todavía no ha ocurrido.
Unas afirmaciones rebatidas por Marín, quien subrayó que se pusieron a disposición del SEPES las parcelas del barranco de Cabrerizas y Huerta Em Barek, ambas rechazadas por la Administración del Estado. De similar manera, destacó que el Ejecutivo melillense intentó incluso rehabilitar viviendas a través del Ministerio de Defensa.
Por su parte, la diputada cepemista Dunia Al Mansouri recalcó que la realidad está en las calles, y que los pisos de Cabrerizas “se están vendiendo como si estuvieran en el Paseo Marítimo”. Para finalizar, planteó a la bancada popular una cuestión, la de cómo se va a dar salida a las VPO.
Una pregunta a la que contestó el presidente de Emvismesa, Juan Antonio Iglesias, indicando que ya se barajan iniciativas como los alquileres con opción de compra o los sorteos de viviendas. De igual modo, defendió su gestión al frente del ente público destacando que gracias a él se han revitalizado zonas de Melilla como la del Rastro.