El Tetris es uno de los videojuegos más vendidos de la historia. Este rompecabezas nació hace 40 años en la antigua Unión Soviética de la mano del matemático, Aleksei Pazhitnov.
Con millones de personas tratando de pasar este juego cada día, aunque no ha sido hasta hace unos meses cuando un jugador ha conseguido ganar el Tetris. Añadiendo además el hecho de que parte de su historia se plasmó el año pasado en una película; este videojuego ha demostrado poseer beneficios más allá del mero entretenimiento.
Este juego de encajar bloques de colores captó rápidamente la atención de psicólogos de todo el mundo, interesados en su potencial para mejorar la salud mental de los propios jugadores.
Existen varias investigaciones que sugieren que el Tetris podría reducir los recuerdos intrusivos que algunas personas experimentan tras vivir situaciones traumáticas.
Asimismo, el Tetris también ha servido para distintas tareas visoespaciales. Estas son las que requieren generar o incluso manipular imágenes en la mente.
Para los expertos de este tipo de estudios, el Tetris es una opción ideal, una vez que requiere de una rotación en la mente de los jugadores.
Los resultados de numerosos estudios han sido prometedores, una vez que ha quedado demostrado que los participantes de los mismos experimentaron menos flashbacks tras haber tomado parte en estas investigaciones.
Gracias a estos resultados, se han ampliado los campos de estos estudios. Enfocándose en recuerdos establecidos hace tiempo, en lugar de recientes. Para ello, se pidió a personas con diagnóstico de Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT) que jugaran Tetris durante 25 minutos una vez a la semana durante varias semanas.
Los resultados mostraron una reducción del 64 % en la cantidad de veces que aparecía un recuerdo específico.
En otro estudio trabajaron con enfermeras de unidades de cuidados intensivos que tenían recuerdos intrusivos relacionados con eventos traumáticos generados por la pandemia de cóvid. Tras cuatro semanas de jugar al Tetris, estas enfermeras vieron una importante reducción en la cantidad de flashbacks y también reportaron mejoras en otros síntomas: insomnio, ansiedad y depresión.
Queda por tanto reflejado que los videojuegos también pueden suponer una ayuda en el cuidado de la salud mental.