El experto Mariano González advierte de que los datos están recogidos sólo durante dos semanas, por lo que no son rigurosos
El responsable del área de Transportes de Ecologistas en Acción, Mariano González, aseguró ayer que si los datos del informe sobre la situación atmosférica local elaborado por la Ciudad en 2013 son reales, Melilla tendría unos niveles de contaminación similares a Madrid en algunos parámetros. González precisó que es arriesgado hacer esta comparativa porque el estudio del Ejecutivo sólo recoge muestras tomadas durante dos semanas. “Sería necesario saber si esos datos pueden extrapolarse a todo el año para hacer un diagnóstico más claro”, indicó.
En cualquier caso, el experto señaló que las conclusiones de este informe en el que, según él, hay numerosos “errores de bulto”, son “preocupantes”. González afirmó que los datos del estudio apuntan que en torno al 60% de la contaminación del aire en nuestra ciudad está provocada por las emisiones de los coches. En este punto, indicó que el porcentaje es menor que en otras ciudades, no porque haya menos contaminación de vehículos, sino porque hay otros dos focos importantes que contribuyen a empeorar la calidad del aire.
El responsable de Transportes de Ecologistas en Acción recalcó que es imprescindible que en Melilla se pongan en marcha políticas encaminadas a reducir la contaminación y lograra una movilidad más sostenible. En este punto, aseguró que el Plan de Movilidad que está elaborando el Gobierno local es insuficiente, porque más que un proyecto global, son actuaciones puntuales. “Es necesario que haya una apuesta clara. Un compromiso económico y político para que el cambio de modelo sea posible”, apostilló.
González dijo que es necesario que en nuestra ciudad se trabaje para reducción el uso del vehículo privado y fomentar la apuesta por un transporte público e calidad. Asimismo, recalcó que es imprescindible la realización de un estudio “más riguroso” sobre la situación de la calidad del aire y afirmó que realizar mediciones puntuales durante dos semanas no es suficiente para saber con exactitud en qué situación se encuentra Melilla.