El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, defendió ayer que la posibilidad de pedir asilo está salvaguardada en la valla de Melilla.
Preguntado por las críticas de algunas organizaciones a las denominadas ‘devoluciones en caliente’ o rechazos en frontera en Melilla y Ceuta, el ministro aludió a la Comisión Europea, que recientemente ha considerado que los derechos de los inmigrantes y su posibilidad de solicitar asilo están a salvaguarda en el modelo español.
Así, ha recordado que en Melilla son “numerosas las personas”, sobre todo sirias, que cada día solicitan asilo en la oficina que Interior tiene instalada.
Fernández Díaz, ha dicho además que España cumplirá con sus compromisos en los cupos asignados de reasentamiento y reubicación de los refugiados llegados a Europa, y reconoció que no está satisfecho con la ejecución del plan acordado por la UE.
Respecto al programa de acogida que acordaron la UE y otros estados no miembros, el ministro ha insistido en que no está “satisfecho ni orgulloso” de lo que se ha hecho hasta ahora con ese plan, que preveía el reasentamiento de 160.000 refugiados en dos años y la reubicación de 120.000.
Sin querer culpar a nadie, el ministro indicó que es responsabilidad de los Estados, pero también de las instituciones, que son las que tienen que garantizar los procedimientos para poder ejecutar el plan.