El portavoz de la Ciudad Autónoma, Daniel Conesa, lo califica como “agresión fascista” y señala al secretario de Organización de CpM, Hassan Mohatar, que debería dimitir por negar lo ocurrido.
El Gobierno autonómico no ha tardado en expresar “su más profunda repulsa” ante la agresión que sufrió su presidente y cabeza de lista del Partido Popular (PP), Juan José Imbroda, a manos de simpatizantes de Coalición por Melilla (CpM) durante el acto de pega de carteles.
Unos hechos que el portavoz del Ejecutivo local, Daniel Conesa, calificó de “agresión fascista”, al tiempo que aseguró que todo lo ocurrido en la madrugada del viernes fue planeado con premeditación por la formación política que lidera Mustafa Aberchán.
Ahondando en esta cuestión, reseñó que desde el Gobierno melillense habían observado que, además del lanzamiento de banderines y diversos objetos contra los integrantes del PP, la zona donde debían pegar sus carteles electorales había sido previamente bloqueada por vehículos que pertenecían a integrantes de CpM.
“Llevan insultándonos durante toda la legislatura, y ahora además intentan intimidarnos agrediéndonos físicamente”, lamentó Conesa, quien subrayó que esta es la “actitud moral del partido que lidera al bloque anti PP”.
Muy duro se mostró el vocal de la Ciudad Autónoma con las declaraciones realizadas por algunos integrantes de CpM en el lugar de los hechos, como su secretario de Organización, Hassan Mohatar, quien negó que se hubiera producido agresión alguna.
“Es de vergüenza que encima nieguen lo evidente, lo que han recogido en imágenes todos los medios de comunicación”, apuntilló Conesa. “Mohatar debería haber dimitido a estas horas por sus declaraciones”.
Al hilo de su intervención en rueda de prensa, señaló que los incidentes registrados no fueron a peor gracias a la prudencia de los afiliados del PP, ya que los seguidores cepemistas “fueron alentados por los diputados de Aberchán a insultar al resto de asistentes”.
“Este es el referente moral de la oposición”, añadió el portavoz del Gobierno, “su actitud es fruto de la desesperación, no tienen vergüenza alguna. Llevan así cuatro años, pero ahora la situación es más grave que nunca”.
Además, recordó que los cepemistas llevan un buen número de imputados y detenidos en sus listas electorales, como su máximo dirigente y varios diputados que están implicados en el caso de los votos por correo. De igual modo, reseñó que el número 13 de su lista dimitió al conocerse que había sido condenado por malos tratos, un asunto “sobre el que CpM no ha dicho ni pío hasta ahora”.
Por último, no se olvidó de la situación de Abdelrrahim Sellam, candidato que cierra la lista del partido y que se encuentra detenido y acusado de un presunto delito de blanqueo de dinero procedente del narcotráfico.
“Que no se vuelva a repetir”
Para poner punto y final a su intervención ante los medios de comunicación locales, Conesa expresó su deseo de que sucesos como el de anoche no se vuelvan a repetir durante lo que resta de campaña. “Nosotros nos centraremos en explicar nuestra gestión de Gobierno y en presentar nuestro programa a los melillenses”, concluyó el portavoz del Ejecutivo melillense.
Los populares inician la campaña
Al margen de la polémica agresión al presidente Imbroda, el Partido Popular de Melilla inició en la mañana de ayer su campaña electoral de cara a los comicios del 22 de mayo. Así, la caravana de los populares, en la que participaron candidatos, afiliados y simpatizantes del partido, comenzó su labor en la céntrica Plaza Menéndez Pelayo, cerca de donde se encuentra la sede de dicha formación política.
La caravana continuará su andadura por las calles de Melilla esta mañana, pues visitará las instalaciones del Mercado Central. Así lo harán también con el resto de zonas de la Ciudad Autónoma, pues la intención del PP es llegar a la puerta de todos los melillenses.