1.- Pacto de cirujanos
Las elecciones locales fueron el pasado 26 de mayo. Durante los días posteriores hubo un silencio entre los políticos de la ciudad, aunque los resultados no arrojaban más alternativas que pactos entre varias formaciones. El primer día del que tuvimos conocimiento de los primeros encuentros fue el miércoles 29. Coalición por Melilla movió ficha y mantuvo una reunión con Ciudadanos el martes 28 y con Vox el 29. Éste último se produjo en el hospital, donde los líderes de Coalición por Melilla (CpM) y Vox coincidieron en el pasillo de quirófanos. Aunque la formación de Jesús Delgado Aboy siempre ha negado ese primer contacto con los cepemistas. Y, en cambio, el líder de CpM, Mustafa Aberchán, lo confirmó.
2.- El ‘gusanillo’ de gobernar
El dirigente de Vox Melilla confirmaba el viernes 31 que ya había mantenido su primer encuentro con el PP de Melilla. Aseguró que su objetivo es entrar en el Gobierno local.
3.- Madrid decide
El lunes 3 de junio el vicesecretario de Estrategia y Política Económica del PP de Melilla, Daniel Conesa, confirma no solo los contactos con Vox, sino también con Cs. Pero matiza que los pactos no se van a labrar en Melilla de forma independiente, sino que se van a tejer en Madrid porque formarán parte de la política de acuerdos que hay a nivel nacional entre estos tres partidos.
4.- No seré un títere
Eduardo de Castro salía a la puerta de la Asamblea el martes 4 para asegurar que no había pactado nada en Málaga. Quiso aclarar todos los rumores que había por la ciudad. Ocho días después de las elecciones, el líder de la formación naranja explicaba que había mantenido encuentros o primeros contactos con todas las formaciones a excepción de Vox. Dijo que se había tomado un café con Aberchán; que también había hablado de la situación política actual con Gloria Rojas, secretaria regional del PSOE; y que el presidente del PP de Melilla, Juan José Imbroda, le había llamado para una reunión. En este último caso, De Castro dijo que casi no habló y solo escuchó las propuestas de Imbroda: formar parte de su Gobierno o abstenerse. Sin embargo, el líder de Cs negó ambas cosas porque ya desde la campaña electoral viene asegurando que no hará presidentes ni a Imbroda ni a Aberchán. Y no creía formar un ejecutivo sin Imbroda porque no le veía capaz de irse. En cambio, sí dijo que Aberchán sí que parecía que podría dar un paso a atrás.
Pero no fue lo único que dijo De Castro. También subrayó que quería entrar en el futuro gobierno si daba su voto a algunas formación, para poder aplicar sus políticas. Y remarcó que no iba a ser el títere de nadie. Además, aclaró que su objetivo era no abstener en la votación de este sábado.
5.- Líneas, más que rojas, rosadas
A mitad de la semana pasada Imbroda salía al paso de todos los rumores que había en la calle sobre el posible pacto entre Cs, PSOE y CpM ante la negativa de la formación de Albert Rivera de gobernar con Vox en toda España, siendo en Melilla la formación que daría estabilidad al Gobierno local junto al propio Cs. Para Imbroda, la línea roja que había marcado Rivera con Vox no era “tan infranqueable” y se podría ir diluyendo. De hecho, no veía como un impedimento este hecho para que en Melilla las tres formaciones de centro-derecha fueran juntas a un Ejecutivo o pacto de Gobierno. Además, esperaba que los partidos con los que pactara su candidatura para presidente formaran parte del Gobierno local futuro.
Pero De Castro insistió en que el pasado resta y que eran necesarios cambios en la política local.
Rojas, por su parte, remarcaba que su objetivo es echar al PP del Ejecutivo local y que se pudiera conformar un acuerdo entre su formación, Ciudadanos y los cepemistas.
6.- Brazos abiertos y chats entre opositores
Imbroda, nada satisfecho con las declaraciones de Gloria Rojas, sobre que no tenía nada que negociar con él porque no iba a pactar nada con el PP, decide abrir sus brazos a la socialista para que entre en el Gobierno de centro-derecha. Para el mandatario del PP, es legítimo que haya un pacto de CpM, PSOE y Cs, pero indicó que “no es ético”. De hecho, declaró que eran “componendas oscuras” y que los melillenses habían optado por “mayoría” por un Gobierno del PP con otras formaciones. De hecho, le llega a decir a Rojas que si quiere un sillón, él se lo puede dar, porque desea hacer una gran coalición con PSOE, Vox y Cs para buscar entre todos el mejor futuro de la ciudad. También dijo que convocaría esta semana a Rojas y Aberchán a su despacho como hizo en el 2015, aunque luego eso no se ha cumplido.
Por otro lado, el líder cepemista decía en Cadena Ser que Rojas le había propuesto hacer un gobierno alternativo la noche electoral a través de un chat en el que también estaba De Castro.
7.- Sin Imbroda
El viernes 7 se cerraba la semana con la afirmación del líder de Cs de que Imbroda le había asegurado que se iría a finales de año del Gobierno local. Eso se lo dijo en aquel primer encuentro que mantuvieron una semana antes, pero no le creía.
El presidente de los populares aclaraba más tarde esta declaración. Decía que su objetivo era marcharse antes de que terminara la legislatura porque tiene un alto coste personal este cargo. Sin embargo, negaba que un pacto con otra formación le fuera a echar de la política y más teniendo diez diputados.
Cs insistía: “sin Imbroda, la cosa variaría bastante”.
Por otro lado, Rojas aclaraba que ella no podría hacer presidente a Aberchán, por su situación judicial, ni tampoco podría éste ocupar ningún cargo con ella en un Ejecutivo. Y reiteraba que estaba a la espera de que Cs tomara alguna decisión para seguir con las negociaciones junto a CpM.
8.- Sin pelos en la lengua
El fin de semana comenzaba con unas declaraciones muy contundentes del vicepresidente primero del Gobierno en funciones, Daniel Conesa. Tildaba de “desvergüenza” que Rojas quiera ser presidenta de la Ciudad con cuatro diputados. Para Conesa es una “fuerza testimonial” el PSOE en la Asamblea. Sin pelos en la lengua lamentaba que el PSOE quisiera pactar con CpM, “un partido radical de carácter étnico-religioso”, en lugar de con el PP. Mientras que en Ceuta, el presidente de los populares, Juan Vivas, sí que cuenta con el respaldo de los socialistas.
Vox también salía para ‘recordar’ al PP que si le abría los brazos al PSOE, ellos no participarían en dicho gobierno.
9.- Melillismo
Imbroda le echaba temple el domingo en la Romería del Rocío para no responder a todas las críticas que estaba recibiendo del resto de formaciones y pedía más “melillismo”. Aseveraba que echaba en falta más “patriotismo” a la hora de abordar los pactos y de hablar de ellos entre los políticos. Insistía en que “si las cosas son democráticas, lo lógico es que gobierne el PP con las circunstancias que sean”.
Aseguró que iba a citar a Rojas y Aberchán en esta semana.
10.- El Gobierno de Aberchán
El presidente del PP toma la decisión el lunes de no cumplir con su idea inicial de entrevistarse con Rojas y Aberchán. Se pregunta para qué les va a citar cuando la prensa está afirmando que la oposición está trabajando en un pacto. Mostró su sorpresa no solo porque estas negociaciones fueran hacia adelante, sino también porque se plantee que De Castro, con un solo diputado, pueda ser presidente de la Ciudad.
Lamentaba que ese pacto tuviera continuación porque cree que un Gobierno de PSOE, Cs y CpM será “débil” y estará dirigido por Aberchán, aunque éste no pueda ser presidente o consejero del mismo.
De todas formas, Imbroda y De Castro se encomendaban a sus direcciones nacionales, que son las que están negociando, para ver si pactaban o no. Aunque el líder de la formación naranja expresaba su deseo de volver a reunirse con CpM y PSOE.
11.- Generoso
Aberchán solo se dejó ver en Cadena Ser estos días de pactos y por fin accedió a hablar con todos los medios tras el pleno del pasado miércoles. Dijo que no tenía mucho que decir, pero ante la pregunta de si se presentaría como candidato a Presidir la Ciudad, aseveró que iba a ser “generoso”. No fue ni un sí ni un no, pero insistió en que su formación iba a buscar ese gobierno de consenso que había prometido en la campaña electoral.
Imbroda, por su parte, pedía “sosiego y frialdad”, para dejar de lado las “fobias personales” que había entre políticos y centrase en un proyecto sobre qué se desea para Melilla.
También el popular hacía referencia a que solo escuchaba en los grupos de la oposición hablar de sillones, en lugar de políticas. Pero reiteraba su oferta de llegar a un acuerdo y de desarrollar un pacto como el del PP y Cs nacional en nuestra ciudad.
Y mientras, De Castro decía que seguía sin indicaciones de Madrid, pero que iba a enviar algunos documentos para que vieran que los populares seguían adjudicando proyectos hasta el último día. Y también se preguntaba si era cierto que se estaban destruyendo informes en las consejerías.
Vox pedía “sentido común” para dar un Gobierno estable a Melilla.
Además, Rojas decía que el PP ceutí es diferente al de Melilla y que los populares solo la insultan.
12.- La abstención del 13
El líder de Cs en Melilla subía ayer las escaleras de la Asamblea en dirección a Presidencia para reunirse con Imbroda. En la mano solo llevaba un documento con las condiciones de un posible pacto: que Imbroda deje su acta de diputado y no sea candidato a presidente; la regeneración y cambios; y que Vox no entre en el Ejecutivo local. Además, prometía a Imbroda, que si se presenta a Presidente, se abstendrá, cambiando su discurso en este sentido.
Para De Castro, todo venía pactado ya entre Cs y PP de Madrid. Sin embargo, el popular melillense se desmarcaba por la noche en un tuit diciendo que su partido no había dicho nada de él renunciase a su escaño.
Aberchán llamó “cobarde”, a nivel político, a De Castro por abstenerse
Rojas esperaba que esta reunión entre PP y Cs no llegara a buen puerto.
Además, a última hora de la tarde ayer Vox y el PP volvían a reunirse. Fue en la Asamblea. El objetivo seguía siendo formar parte del futuro Gobierno.
Pues ya era hora de un cambio en Melilla y más aún tras haber desalojado a ese sujeto.
Ciudadanos es consciente de que si opta por favorecer un gobierno CPM-Psoe desaparecerá de la Asamblea en unas próximas elecciones, el votante de centro derecha no se lo perdonará.
PARECE UNA SERIE DE NETFLIX.....A VER COMO TERMINA.