Hasta 720 llamadas se atendieron en el teléfono de emergencias 112 durante la jornada del domingo debido al fuerte viento que alcanzó rachas cercanas a los 100 kilómetros por hora.
En una nota remitida por la Consejería de Seguridad Ciudadana, se informa de que los servicios de Bomberos, Policía Local y Protección Civil tramitaron y resolvieron casi 190 expedientes por las incidencias relacionadas con el viento, algunas de las cuales publicó en su edición de ayer El Faro.
Durante la jornada, se produjeron caídas de ramas, desplazamiento de contenedores y mobiliario urbano, caídas de cascotes y objetos de terrazas, daños en cubiertas y en puertas de naves, así como cables que se descolgaron de postes y fachadas.
Las condiciones adversas del tiempo mantuvieron ayer en Melilla la alerta naranja, lo que obligó al cierre de instalaciones municipales, parques y jardines.
Las comunicaciones aéreas y marítimas también se vieron afectadas, fundamentalmente la ruta entre Melilla y Almería, ya se canceló tanto el viaje previsto de barco como el único enlace aéreo planificado con destino y origen en esta ciudad andaluza.
Pese a las fuertes rachas, sólo se produjeron daños materiales.