La Delegación del Gobierno en Melilla admitió ayer que los pasos fronterizos de la ciudad sufren cierres parciales, pero aclaró que nunca son “injustificados” y responden a problemas de orden público, como apedreamientos desde el lado marroquí, o el “hostigamiento” de los porteadores.
En una nota de prensa, la Delegación del Gobierno informó de que el viernes se registraron incidencias en las fronteras de Barrio Chino y Farhana que obligaron a cerrar la primera durante una hora, y la segunda durante parte de la jornada para los vehículos.
Así, negó que, en algún momento del día de anteayer, se registrara un cierre simultáneo de las tres fronteras.
Añadió que el tráfico de vehículos se cortó en la frontera de Farhana desde las 12:50 horas, a instancias inicialmente de las autoridades españolas y después, en toda su prolongación a lo largo del día, de las marroquíes, por cuestiones de seguridad e incidentes en la zona de Marruecos.
En cambio, el tránsito peatonal por la frontera de Farhana, desde el lado español y hacia el vecino país, se mantuvo abierto, salvo en circunstancias que obligaban a cortarlo, como lanzamientos de piedras y “amenazas e insultos desde la parte marroquí”.
Circunstancias “peligrosas”
Circunstancias que, según la Delegación, eran “extremadamente peligrosas” tanto para los agentes de los cuerpos de seguridad que prestan servicio en dicha frontera como para los transeúntes, adultos o menores, dispuestos a acceder a Marruecos por el mismo paso fronterizo.
“El hostigamiento por parte de quienes intentan acceder a la ciudad desordenadamente fue continuo, impidiendo que la salida peatonal desde Melilla se llevara a cabo con la fluidez pretendida por las autoridades de nuestro país”, señaló la Delegación del Gobierno.
Debido a la situación, la Policía Local se encargó de ir retirando los vehículos de la cola hacia dicha frontera, dedicados en su práctica totalidad al paso de mercancías.
Barrio Chino
En cuanto a la frontera de Barrio Chino, la Delegación apunta que solo estuvo cerrada desde las 18:20 a 19:40 horas, momento en que las autoridades marroquíes ordenaron su zona y fue posible reabrir la frontera.
El paso de Beni Enzar, en cambio, no cerró en ningún momento y operó sin incidentes, según la autoridad gubernamental, que precisó que el tránsito a Marruecos por el paso principal entre Melilla y el país vecino no dejó de funcionar en ningún momento.
Insistió en que cuando hay cierres fronterizos, obedecen siempre a razones de seguridad por aglomeraciones en el lado marroquí que, a instancias de Marruecos o de las autoridades españolas, “resultan inevitables entretanto se ordena la zona”.
Los cierres también se producen “por hostigamientos por parte de personas que quieren acceder a Melilla sin control y desordenadamente, con riesgo evidente tanto para la integridad de los policías como para la de cualquier transeúnte o usuario de nuestras fronteras”, remarcó.
“Extrema presión”
“La extrema presión de los porteadores sobre los distintos pasos fronterizos es, siempre, la causa principal de las alteraciones en el normal funcionamiento de los mismos”, agregó la representación del Gobierno central.
Asimismo, denuncia que la resistencia de muchos de esos porteadores a admitir la exclusión de Beni-Enzar del tránsito de mercancías incide negativamente en el proceso de reajuste y normalización actualmente en marcha.
El objetivo de dicho proceso es “conseguir una frontera principal fluida y segura, tanto para viajeros como posibles visitantes en dirección a Melilla o viceversa”, concluye la Delegación del Gobierno.
Pero q sabes usted dlk pasa en la frontera si el viernes hubo un policia q pedia permiso alas 8h de la mañana y se vas de compra dice q hoy n hay compra , acaso xa ir de compra hay q tener dias q injustos soy. Ojala se cierre unas semanas . Ni salir ni entras . Y verem el resultado