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La Consejería traerá esta semana a una experta en estos trabajos del Ministerio
El terremoto del pasado 25 de enero dañó la estructura de la iglesia de La Purísima. El templo de Melilla La Vieja vio cómo se rajaban sus paredes y cómo algunas estructuras dejaban de ser tan fuertes. Por ello, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte inició hace unos meses la reforma total de este lugar de culto. Pero este proyecto de rehabilitación es acotado. Sólo se pueden utilizar los más de 770.000 euros en la rehabilitación de las paredes y techos. Este programa no recoge la necesidad de cambiar el suelo ni de restaurar los retablos de la iglesia. Por eso, la Consejería de Cultura quiere ponerse manos a la obra para lograr un embellecimiento total del templo antes de abrirlo a los fieles.
Esta semana, previsiblemente, una experta en restauración del ministerio visitará la ciudad para ver los cinco retablos de La Purísima. El objetivo es que redacte un informe sobre la ‘salud’ de estos elementos.
Desde Cultura señalan a El Faro que no es que estén muy mal estas piezas, pero sí que les viene bien que manos expertas saquen el esplendor que tenían cuando fueron creadas por los artesanos.
Los retablos
El objetivo de la consejería sería pagar directamente el arreglo de los retablos de la iglesia.
Se podría hacer con un proyecto específico para el próximo año y además, aprovechar para renovar el mobiliario del templo, que también sufrió algunos daños por el terremoto.
De todas formas, habrá que esperar a que la experta del ministerio haga este estudio y concrete el presupuesto necesario para esta actividad de rehabilitación.
El retablo de la Divina Pastora es el que está en peores condiciones. Asimismo, tienen algo de deterioro los de la Capilla de las Ánimas y el de la Orden de San Francisco. El que está mejor conservado es el situado en el Altar Mayor.
En cuanto al suelo, Cultura destaca que está muy deteriorado. No fue a causa del terremoto, sino del paso del tiempo y de que las baldosas que cubren toda la planta de la iglesia fueron “económicas” en los tiempos que fueron compradas.
La Consejería indica que no tiene mucho espesor y sería una buena forma de cerrar la rehabilitación del templo la instalación de un nuevo suelo que no tiene porqué ser un proyecto caro y que podría hacer frente la Ciudad el próximo año.
Las criptas
Pero bajo el suelo hay varias criptas. De momento se han encontrado dos, aunque es muy probable que haya muchas más.
Antes de poner un suelo nuevo, la idea de Cultura es realizar un trabajo arqueológico y lograr sacar los escombros de obras anteriores que se almacenaron en estas tumbas para que puedan ser visitadas en un futuro. Sería un proyecto de cara al 2017 de mucho trabajo porque los restos humanos están mezclados con la basura.