La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) de Melilla ha denunciado al director general del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) por lo que califica de “falta de sensibilidad” en su tratamiento al colectivo de usuarios y a los trabajadores del Centro Polivalente de Mayores.
El sindicato alude a la situación originada a partir de que el Imserso no planificara “en tiempo y forma la contratación temporal, con la nueva Ley de la Reforma Laboral, después de una moratoria de 3 meses para adaptarla”.
El problema creado, argumenta la nota de prensa, derivó en la disminución del personal del Centro, “de distintas categorías” y “en los distintos turnos”, al dejar en suspenso las contrataciones programadas previamente para autorizar otras contrataciones de última hora con el objetivo de paliar la Semana Santa.
Estas, dice CSIF, son un “mal parche”, y “no responden ni mínimamente” a las necesidades de cobertura de servicio que presenta un centro cuyos trabajadores “ya vienen sobrecargados y tensionados por el sacrificio que han tenido que realizar durante la pandemia”.
Más adelante, la denuncia del sindicato se pregunta si este es “el reconocimiento que proporciona el Imserso a sus profesionales”, y le recuerda que no es posible depender exclusivamente del voluntarismo y humanidad de los trabajadores, puesto que el mismo “también tiene un límite”.
Finalmente, el comunicado exige que Imserso proporcione una solución inmediata a tan delicado asunto, y espera que la misma “sea satisfactoria, por el bien del funcionamiento del Centro, los trabajadores y nuestros mayores”.
En enero pasado, CSIF había pedido que se activara un plan de contingencia en el Centro Polivalente de Mayores para combatir la alta incidencia y contagiosidad de la variante Ómicron. Entonces, los sindicalistas refirieron que el personal del lugar estaba “sobrecargado por la falta de efectivos desde las recientes Navidades”.
Los usuarios deberían de disponer de un control de calidad de los servicios que reciben nuestros mayores en todos los órdenes: Sanitario, alimenticio, rehabilitación, terapias, mobiliario.. etc. por los cuales pagan después de haber cotizado toda una vida de trabajo. No hay mejor vigilancia que la de los propios usuarios y familiares. Esto es lo que se necesita, implementar el mecanismo de participación en la gestión en torno a la calidad de servicios que en definitiva es la calidad de vida de nuestros mayores. Lo demás son beneficios empresariales y políticos.
El centro está por su parte ,a falta de que se preocupe más y nó pssar de muchos temas ,referente al centro de mayores