-
Alrededor de 1.000 corredores participaron ayer en la segunda edición de la Color Run. Después de la marcha, hubo una fiesta con DJ’s en la Plaza Multifuncional
Melilla celebró ayer la segunda edición de la Color Run, la marcha más lúdica del año. El evento estuvo dirigido a familias, jóvenes, niños y grupos de amigos. De este modo, alrededor de 1.000 corredores se concentraron desde las 19:00 horas en la plaza San Lorenzo.
Durante el espectáculo deportivo y festivo se repartieron miles de kilos de polvos de colores entre los corredores. Un grupo de zumba animó a los participantes momentos previos a la carrera. Durante una hora imitaron las coreografías de los monitores, mientras por los altavoces sonaban ritmos latinos a todo trapo. Tras este peculiar calentamiento, los ‘runners’ fueron regados de polvos de colores por dos cañonazos.
Poco antes de las 20:30 horas se dirigieron al punto de salida para iniciar la marcha. El público asistente fue muy variado, contando con familias, grupos de amigos, muchos jóvenes o incluso quienes venían acompañados de sus mascotas. La prueba popular se realizó al ritmo de cada uno, corriendo, caminando o bailando. Entre los corredores también estuvo la propia viceconsejera de Juventud, Isabel Moreno.
Los cinco kilómetros de trazado con salida y llegada en la Plaza Multifuncional, transcurrieron por el paseo marítimo hasta el Dique Sur y el regreso. El primero en completar el recorrido se llama Abdusamed.
La carrera tuvo un claro carácter solidario, ya que la Asociación Autismo Melilla habilitó un puesto informativo en la plaza donde se pudieron adquirir camisetas, mochilas de tela o fundas para móviles. Con una suelta de globos, minutos antes de la salida, los integrantes de la entidad protagonizaron una suelta de globos.
Cuando los participantes llegaron a la meta no hubo mucho tiempo para descansar. Bañados de color de los pies a la cabeza siguieron moviendo sus cuerpos con la música de DJ’s Invictus, un grupo formado por jóvenes melillenses.
En la propia plaza se habilitó un photocall en el que los corredores se hicieron varias fotos que compartieron en las redes sociales para participar en un concurso, organizado por la Viceconsejería de Juventud.