El recién ascendido a presidente del Partido Popular, Pablo Casado, visitó ayer el perímetro de Ceuta. Pocos días después de que 602 inmigrantes subsaharianos entraran por la fuerza en la ciudad, el líder popular se ha desplazado a la zona para interesarse por la situación de la valla y de los agentes que la custodian.
Durante su paseo, el dirigente político hizo un llamamiento a alejarse del “buenismo” en temas de inmigración y acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de demagogia. Aseguró que las decisiones del presidente del Gobierno como la acogida del buque ‘Aquarius’, habían servido de efecto llamada. Si bien es cierto que el caso de este barco fue una emergencia y que debe tratarse como un caso puntual, no le falta razón a Casado al pedir mesura en los mensajes que lanzamos al exterior. España no puede acoger a todos.
Respecto al asalto a la valla, el líder popular exigió, como no puede ser de otra manera, que los agentes de la frontera cuenten con la mayor protección posible durante el cumplimiento de su labor. Para ello, la primera medida debería ser aumentar el número de efectivos en las vallas, tanto de Ceuta como de Melilla, algo que vienen reclamando ambos Gobiernos autonómicos desde hace tiempo. Esperemos que si Pablo Casado llega a la Moncloa recuerde su visita a Ceuta, sea consecuente con sus declaraciones y ponga los medios necesarios para que esto ocurra.