El pasado viernes 13 de junio, la Escuela de Música 'Paula Guillén Gallego' de Asbanor dejó una huella imborrable en Madrid al participar en el musical 'Un mundo por salvar', una obra original con inspiración en el clásico de Mary Poppins. La representación, fruto de una colaboración con la escuela madrileña 'Estudio A Escena', tuvo lugar en el teatro del colegio Montpellier ante un público que acogió con entusiasmo esta propuesta artística.
El evento formó parte del festival de fin de curso de 'Estudio A Escena', en el que los alumnos de la escuela muestran el trabajo desarrollado durante todo el año en disciplinas como teatro, danza, música y acrobacias aéreas. Como colofón del acto, se presentó este musical en el que un grupo de músicos melillenses tuvo un papel destacado, compartiendo escenario con actores, cantantes y bailarines madrileños en una experiencia única de intercambio artístico y humano.
Un proyecto nacido de la amistad
La iniciativa surge tras varios encuentros entre los responsables de ambas escuelas, que desde hace años mantienen una estrecha colaboración. “El dueño de 'Estudio A Escena' es un íntimo y estrecho colaborador de nuestra asociación desde hace 25 años, es cantante. De hecho, la última actuación que hicimos en Melilla, el Soto del Parral, era el tenor cómico. Entonces, bueno, abrieron la escuela hace un par de años y surgió la idea de poder hacer un intercambio entre Melilla y Madrid y esta fue la manera de la que encontramos hacer un primer acercamiento", ha explicado Sergio Rincón, pianista en la función.
Este primer encuentro pretende ser el inicio de una colaboración estable entre las dos instituciones, con el objetivo de realizar al menos una actividad conjunta al año, ya sea en Melilla o en Madrid. La idea es fomentar el intercambio cultural, artístico y personal entre alumnos y profesores de ambas ciudades.
La representación
'Un mundo por salvar' es una obra que fusiona elementos de fantasía y conciencia ecológica, con la figura de Mary Poppins como guía en una historia que invita a reflexionar sobre el futuro del planeta. La puesta en escena combinó interpretaciones teatrales, coreografías, canto en directo y espectaculares acrobacias aéreas sobre telas, aportando un enfoque dinámico y original.
Desde Melilla, el elenco de Asbanor estuvo formado por Sergio Rincón (piano y dirección musical), Salvador Bellido (teclado y saxo tenor), Adriana Bellido (saxo alto), Claudia Bellido (clarinete), Víctor García (percusión), y María del Carmen Gálvez, quien interpretó a Mary Poppins, aportando su voz como soprano y su presencia escénica a uno de los papeles principales. Todos ellos, alumnos o profesores de la Escuela 'Paula Guillén Gallego', demostraron un alto nivel artístico y profesional.
La dirección de la obra estuvo a cargo de Silvia Fuentes, directora de 'Estudio A Escena', con Ángel Castilla como guionista y actor principal.
Preparación a distancia
La preparación del espectáculo no estuvo exenta de retos. Los ensayos se realizaron a distancia, con grabaciones compartidas entre Melilla y Madrid para que ambas partes pudieran preparar sus intervenciones de forma coordinada. El ensayo general se celebró el jueves 12 y el mismo viernes se llevó a cabo la prueba de sonido antes de la representación.
A pesar de la logística compleja, el resultado fue brillante. “Hubo un intercambio al final de placas entre las dos escuelas encima del escenario, nos aplaudieron muchísimo y yo creo que incluso se sorprendieron de que desde Melilla llegásemos allí con un grupo tan apañado y que funcionase tan bien. Que se sorprendan de que Melilla hace tantas cosas y que tiene tantas cosas relacionadas con la cultura y sobre todo de calidad, siempre te da un subidón”, ha afirmado Rincón, satisfecho con la acogida recibida.
Este primer paso marca el inicio de una iniciativa ilusionante que promete nuevas oportunidades para los jóvenes músicos de Melilla. Si todo se consolida, 'Un mundo por salvar' habrá sido mucho más que un musical: será el germen de una colaboración duradera que une talento, amistad y cultura.
Tiene que ser de mucho alivio, el que viaje a Madrid y de paso, encontrarse con la actuación de “Asbanor”, porque lo que es localmente, al parecer, se retraen mucho, en las ganas de actuar, para seducir a sus paisanos. Así, de esta forma se encuentra, el “Templete”, del Parque Hernández, que al parecer está más bien a punto de caerse y no será por el uso, sino por el desuso, al igual que cuando no era Asbanor, se les veía más en variados actos, que ahora, con el modificado cambio de nombre.