El sindicato de enseñanza Sate-Stes anunció ayer que llevará ante el fiscal la masificación de las clases en 103 aulas de Melilla.
La formación sindical ha elaborado un informe demoledor con unas ratios de alumnos muy por encima de lo que permite la ley.
La noticia cayó como un cubo de agua fría al director provincial de Educación, José Manuel Calzado, que admitió ayer que los datos recogidos por Sate-Stes son verídicos, pero no entiende que si esto viene pasando desde hace siete años, se denuncie ahora.
Este argumento no es el más afortunado. Es cierto que llama la atención que el sindicato de enseñanaza denuncie ahora ante la Fiscalía la masificación en las aulas de Melilla, pero por la proximidad de las elecciones generales. En ningún caso, el tiempo transcurrido puede servir de escudo. Sobre todo porque en Melilla las competencias de Educación no están transferidas. Así que el palo de Sate-Stes se lo lleva el Gobierno central, justo cuando queda poco más de un mes para el inicio de la campaña electoral.
Calzado, para defender su punto de vista, ha echado el marrón a los directores de los colegios que, según explicó en declaraciones a El Faro, son los que tienen que distribuir los alumnos por clases y pedir profesores al Ministerio.
Cuesta entender entonces que sean los centros los responsables de tener aulas en las que ya no cabe ni un alfiler.
Obviamente, la solución al problema de la masificación en las aulas de Melilla no puede pasar por montar barracones en los patios de los colegios, como ocurre en la Comunidad Valenciana o en la Región de Murcia.
Es cierto, como dice el director provincial de Educación, que la denuncia de Sate-Stes llega cuando ya está en camino la construcción del instituto del Jardín Valenciano y del colegio que irá en Gabriel de Morales.
Lo que no han tenido en cuenta Calzado en sus argumentos ni la formación sindical a la hora de denunciar es que este país estuvo al borde de la quiebra económica y que, a duras penas, estamos saliendo de la crisis.
En cualquier caso hay una realidad a tener en cuenta. En Melilla tenemos el terreno que tenemos y la población sigue creciendo sin parar, con una tasa de natalidad muy por encima de la media española. De hecho, el propio informe de Sate-Stes demuestra que las aulas con más alumnos son las de Infantil y Primaria.
El problema hay que solucionarlo y habría que buscar una fórmula a corto plazo. Algo tendrán que ver las aulas masificadas en colegios e institutos de Melilla con el fracaso y el abandono escolar.