A muchos españoles les ha sorprendido el anuncio del acuerdo entre el PSOE y Unidas Podemos para establecer un Gobierno en plena, aún, resaca electoral. Y es lógico que sorprenda, ya que este preacuerdo es el resultado de unas segundas elecciones que se propiciaron después de ni llegar a un acuerdo en meses.
‘Ahora sí’ era el eslogan del PSOE en estas elecciones y parece que estos meses ya se han resuelto todas esas diferencias que tras el 28 de abril parecían irreconciliables entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
El líder de Unidas Podemos nunca ha dejado de mostrar su interés en formar gobierno junto a Sánchez, pero era éste quien, en repetidas ocasiones, hizo el feo al de la formación morada.
Parece ser que ahora es cosa del pasado todo ese cruce de declaraciones del que pudimos ser testigos los españoles hasta en el debate televisivo previo a la jornada electoral.
Pero este no es el final de la historia, ni mucho menos. Ahora deben buscar el apoyo del resto de grupos para, o bien apoyen o bien se abstengan, y poder configurar gobierno. Y después de los resultados de esta segunda cita electoral, no lo tienen nada fácil.
Tanto PSOE como Unidas Podemos han perdido escaños en comparación con abril. Los grupos opuestas han ganado en votos y el hecho de que ahora sí quieran pactar, va a encontrar el rechazo de ciertas formaciones. Se avecina que el tema aún traerá cola.
Pues sí. Ahora sí. Sin interrogaciones. "Más vale tarde que nunca" dice nuestro refranero. Y también recuerdo las palabras "el que esté libre de pecados que tire la primera piedra".
Bienvenido sea este preacuerdo y más tarde el Acuerdo.