El joven melillense B.E.M. aceptó ayer un año de prisión por un delito de robo con fuerza, tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía. Sin embargo, no cumplirá esta pena al carecer de antecedentes penales, por lo que el juez de lo Penal número 2 dio el visto bueno a la suspensión de la condena a condición de que el acusado no cometa ningún delito en los próximos dos años.
Los hechos ocurrieron el 14 de febrero del año pasado en la calle Río Darro. El joven melillense rompió los cristales traseros de un vehículo que se encontraba estacionado en la vía pública y robó la radio–CD del coche. Los daños causados se valoraron en 220 euros y la radio en 100 euros. La compañía aseguradora de la víctima corrió con los gastos de la reparación, por lo que no se exigió responsabilidad civil al acusado.
El abogado defensor llegó a un acuerdo con la fiscal para aplicar a su cliente la pena mínima por un delito de robo con fuerza. Dado que el joven carece de antecedentes, el letrado solicitó en el juicio la suspensión de la pena, a lo que el juez accedió. Sin embargo, si el joven comete otro delito en los próximos dos años y es condenado se le sumará el año de prisión que aceptó ayer.