Los gastroenterólogos confirman que los bebés que toman esta proteína que se encuentra en cereales como el trigo a tan corta edad previenen la aparición de la celiaquía.
El doctor de la Unidad de Gastroenterología y Nutrición Infantil del Hospital de Terrasa de Barcelona, Benjamín Martín Martínez, indicó que desde las federaciones nacionales de especialistas en esta área de la salud se está recomendando que a partir de los cuatro meses de edad los bebés empiecen a tomar gluten, esto es, una proteína que se encuentra en todos lo cereales a excepción del maíz y el arroz.
Martín Martínez ofreció una charla sobre la alimentación complementaria en la pasada IV Jornada de Pediatría celebrada en Melilla hace unas semanas. De esta forma, este experto en nutrición infantil aseguró en declaraciones a ‘El Faro’ que se trata de “un asunto muy importante hoy en día y que algunas veces está un poco olvidada porque la alimentación de los primeros meses del niño está muy estudiada pero a partir de este momento ya no hay este conocimiento”.
Así, aseguró que saber los siguientes alimentos que puede ir tomando el niño y con qué frecuencia da la posibilidad de saber cómo van a influenciar en esta persona con el paso del tiempo, siendo el objetivo prevenir situaciones como la obesidad o alergias.
“Los gastroenterólogos y especialistas en nutrición se dedican a estudiar y a analizar este tipo de alimentación complementaria para que no se produzcan situaciones de éstas en el futuro”, argumentó.
Abuso de proteínas
Martín Martínez destacó dos puntos importantes que deben ser tenidos en cuenta por los padres, como son el abuso de las proteínas y la introducción del gluten a partir de los cuatro meses.
En primer lugar, matizó que “el abuso de las proteínas que hacemos y, no se sabe porqué, si a los niños pequeños de dos años se les da muchas proteínas podemos predisponerlo a ser un obeso cuando sea adulto”.
Evitar la celiaquía
En segundo lugar, informó de que ha habido un cambio en la alimentación reciente respecto a la introducción del gluten; así, hace unos años había un caso por cada 1.000 niños y actualmente puede llegar esta proporción a uno por 80, tal y como apuntó el doctor.
“La introducción del gluten hasta ahora se hacía después de los seis meses porque se pensaba que de esta forma se prevenía la celiaquía y ahora se ha visto que lo importante es dar gluten después de los cuatro meses y antes de los siete. Un punto importante que se debe divulgar y no dejar para más adelante y combinarlo con la lactancia materna”, aseguró.
La celiaquía es una intolerancia permanente al gluten, una proteína que suele darse en los cereales, sin embargo, una gran proporción de los productos elaborados por las industrias contienen espesantes que suelen provenir de la harina de trigo y, por lo tanto tienen esta sustancia, como por ejemplo el tomate frito y un gran número de alimentos prefabricados.
Martín Martínez indicó que no se sabe los factores o desencadenantes que hacen que un niño que esté predispuesto a padecer celiaquía finalmente desencadene esta patología en un momento determinado, pero al introducir el gluten en temprana edad se reduce el número de casos.
Así, aseguró que según los últimos estudios en otros países con menos lactancia materna, y donde se consume mucho gluten pero se introduce más tarde sí hay una proporción más alta de esta enfermedad.
Posibles causas
Este experto indicó que hay muchos más casos de celiaquía por el consumo de productos que contienen gluten. “Se cree que esta proteína es ahora más agresiva que hace años, a lo que hay que sumar que las técnicas de diagnóstico han cambiado proporcionando más datos seguros sobre si un niño padece o no esta enfermedad”, comentó el doctor.
Primeras alergias
La primera alergia que puede desarrollar un niño es de aquello que primero come, es decir, la leche; que, como todas las alergias, han ido aumentando en los últimos años, tal y como remarcó Martín Martínez.
La lactancia materna es muy importante, sin embargo, este experto aseguró que los gastroenterólogos chocan un poco con las recomendaciones de la OMS. En este sentido, aseguró que no es igual que se aconseje la lactancia materna en un país europeo que en otro no desarrollado en el que pueden incentivar que se dé de mamar a los bebés hasta los dos años por la falta de otro tipo de recursos y alimentos.
De esta forma, indicó que no hace falta en países como España alargar el destete del bebé mucho tiempo, por lo que aseveró que “una madre cumple con su obligación de darle lo mejor a su hijo con seis meses de lactancia. A partir de este momento, se trata de algo personal en el que se valoran otras aspectos, como el contacto con el bebé y su desarrollo psicológico, pero desde el punto de vista nutricional, a través de las numerosas fórmulas y alimentación complementaria de la que se dispone, no es necesario su continuación”.
Por último, Martín Martínez destacó la importancia de que los niños tomen medio litro de leche al día como mínimo para su futura salud ósea, ya que aquellos que no toman lacteos en la infancia no tendrán un pico y con 20 años que no será la adecuada. Así, sin este buen estado de sus huesos perderán como todos los humanos ese calcio progresivamente y con 40 años pueden estar en una situación nefasta de osteoporosis, tal y como apuntó este especialista en nutrición.