-
Estando fuera de servicio, ha reanimado a un hombre en parada cardiorespiratoria
Un agente de la Policía Nacional fuera de servicio y destinado en Melilla ha salvado la vida de dos personas en sólo un mes, la última hoy, cuando ha reanimado a un hombre que entró en parada cardiorrespiratoria en la vía pública.
En una nota de prensa, la Jefatura Superior de Policía ha informado de que los hechos han ocurrido hoy a las 12.30 horas, cuando el policía iba caminando por la calle General Marina para entrar de servicio en la estación marítima y observó cómo un joven de unos 28 años de edad estaba sufriendo un desvanecimiento.
El policía se aproximó de inmediato al joven, que estaba apoyado en una pared y con el rostro pálido, y observó que se estaba asfixiando con su propia lengua, por lo que pidió ayuda a un transeúnte y tumbó a la víctima en posición de seguridad, logrando liberar la lengua tras presionarle la boca al ver que no reaccionaba.
Al encontrarse cerca de una clínica, otros ciudadanos fueron a pedir ayuda a este centro médico, del que salieron una doctora y una enfermera para asistir al joven.
En ese momento, la víctima entró en parada cardiorrespiratoria y colaborando los tres, sanitarias y agente, llevaron a cabo una resucitación cardiopulmonar, aunque para salvar la vida del joven fue necesario aplicarle una descarga con un desfibrilador.
El joven fue trasladado en ambulancia con pulso y ha sido ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Comarcal, encontrándose estable pero bajo vigilancia médica.
El agente que ha asistido a este joven es el mismo que salvó la vida a otro ciudadano que sufrió un infarto en la vía pública el 14 de febrero en la calle General Pareja, cerca de donde han ocurrido hoy los hechos, cuando se dirigía a su puesto de trabajo y consiguió que el hombre recuperara la respiración y el pulso gracias a sus maniobras de reanimación cardiopulmonar.