Cruz Roja reparte leche y galletas entre los inmigrantes acampados en la Plaza de España. Los inmigrantes sirios acampados en la Plaza de España se negaron ayer a abandonar el improvisado campamento que desde el pasado lunes mantienen y descartaron la posibilidad de regresar al Centro de Estancia Temporal (CETI) donde residían hasta esta semana. Las 60 personas que componen la comunidad siria en el CETI de Melilla, entre las que hay unos quince menores, buscan con esta medida acelerar su salida a la península, según explicó uno de sus portavoces.
Los inmigrantes han colocado pancartas con su reivindicación de querer viajar a la península, así como toldos y cartones con los que se resguardan de la humedad y también de la lluvia que cayó ayer en Melilla. La concentración, según el propio delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, no está autorizada, por lo que instó a estos ciudadanos sirios a volver al CETI y a hacer uso de los instrumentos que la ley pone a su alcance, como es la solicitud de asilo.
Por su parte, Cruz Roja repartió en la mañana de ayer entre los inmigrantes leche y galletas para que pudiera ingerir algo caliente tras dos días instalados en la Plaza de España.
Traslado a la península
Otro de los portavoces del grupo sirio afirmó que su intención no es quedarse en España, sino que su objetivo es viajar a otros países europeos donde en algunos casos tienen familiares y en otros casos, aseguran que pueden pedir la reagrupación familiar y sacar a sus familias de la guerra civil declarada en su país de origen.
Desde la Delegación del Gobierno reconocieron la posibilidad de los inmigrantes de origen sirio de acogerse al derecho de asilo, dada la situación que vive su país, pero el ente gubernamental insistió el pasado martes que este tipo de medidas de presión “no conducen a ninguna parte y mucho menos teniendo a niños en la calle”.
En Ceuta se está viviendo una situación similar, pues un grupo de inmigrantes sirios y argelinos están concentrados en la céntrica Plaza de los Reyes.