El cine ha dado un giro de 180 grados. Desde los clásicos en blanco y negro a cintas repletas de efectos especiales, y guiones menos elaborados, pero aún así enganchan a un público que dista mucho de los que todavía amamos las historias de Billy Wilder, Frank Capra u Orson Wells, entre muchos otros.
Para conversar sobre la historia del cine hablamos con un especialista en la materia, José María Navarro. Cinéfilo y amante de las películas de hoy y de siempre.
–¿Cuándo y cuáles fueron los motivos que le impulsaron a escribir y hablar sobre cine?
–En principio, no solía escribir, ni hablar mucho de cine. Siempre he escrito columnas de opinión de ámbito político o defensa, pero siempre he tenido bastante conocimiento de cine y he hecho programas de cine, junto en Televisión Melilla, junto con un compañero, y la verdad es que no nos quedaba nada mal. Hablábamos de directores monográficos, o bien de películas de géneros monográficos y recuerdo una época bastante atractiva entre 2008- 2012 que me atrevería a decir que era uno de los mejores programas que se emitían en España. Tengo bastante experiencia dirigiendo dos semanas de cine allá por 1997 cuando las Semanas de Cine eran Semanas de Cine y no aquellas que ya se pueden ver por plataformas digitales. Hice una gran amistad con actores como Sazatornil o Concha Velasco de la cual guardo maravillosos recuerdos.
–¿Es importante el cine en la vida de las personas?
–Sí, el cine es muy importante en nuestra sociedad. Creo que desde principios del siglo XX no se entendería el cine como espectáculo, como desconexión mental, como baño de imaginación, identificación con los personajes, con los géneros. El cine forma parte de nuestra vida. Sea el cine en gran pantalla o en televisión, en series, en streaming... lo que algunos llaman equivocadamente ‘teatro en movimiento’. Si nos trasladamos al siglo XVII se llevarían una gran decepción al no haber cine y a la inversa.
–¿Qué críticos de cine admira?
–No tengo un crítico favorito. Lo que sí me gustan mucho son las revistas de cine donde escriben muchos críticos como Carlos Boyero ,que me encantaba, y a nivel de programas por ejemplo ‘Días de Cine’, en todas sus épocas, siempre lo he tenido como referente de cine, incluido europeo. En el ámbito de la lectura, las revistas ‘Fotogramas, ‘Cahiers du cinéma’. Como periodista, me encantan que escriban sobre algo determinado. En este caso, cine y la impresión, literalmente, de las revistas es especialmente buena. La verdad es que las revistas de cine tienen una especial impresión, rozan lo artístico y lo filosófico. Me alegra que pese a la crisis que hemos atravesado los periodistas, los profesionales de cine se mantienen.
–¿Cuál es su película favorita?
–Me gustan muchas películas y muchas que sigo viendo. Me gustan muchos géneros o directores. Cualquier película, o corto de Charles Chaplin, Buster Keaton o Rosellini o John Ford, Stanley Kubrick o Spielberg, con sus fracasos y éxito, ha demostrado que la calidad no está reñido con lo comercial. Denise Belinef, de la última cantera, es un grandísimo director. Películas como ‘Atraco perfecto” ‘2001’, ‘Tiburón’, ‘Encuentros en la tercera fase’, por supuesto, ‘La lista de Schindler’, ‘Salvar al soldado Ryan’. No quiero olvidar las de los años 20 o el cine mudo. Nunca me ha gustado elegir. Me sucede como en la lectura. Es cuantitativamente y cualitativamente imaginación pura.
–¿Cuál fue la primera película que vio en el cine?
–La primera, según me dicen mis padres, fue ‘West Side Story’, pero al parecer, me dormí. Por el contrario recuerdo con mucho cariño, las películas que mi padre con mucha paciencia me llevaba a ver en Barcelona. Todas las de Disney de la época.
–¿Qué imagen de película guarda en la retina?
–Cada película es un mundo con lo cual no espero nada de ninguna hasta que las veo. Me veo preparado para cualquier cosa y cuando salgo de la sala siempre me quedo con algo positivo según lo que vea u oiga. Si se combina diálogo e imagen es la perfección total.
–¿Una frase de película?
-”He atravesado océanos de tiempo para encontrarme contigo”. Si mal no recuerdo era así. Una frase que le dice Gary Oldman a su amada en ‘Frankenstein”, de Coppola.
–¿Cuál es para usted la mejor época del cine?
–Yo no quiero hablar de mejores épocas y estoy en completo desacuerdo con que unas épocas son mejores que otras. Todo lo contrario. Considero que la época de comienzos de este siglo, en cine es excepcional y estamos viendo directores atrevidos, creativos y muy interesantes con películas variadas en su temática y valientes. Cada época tiene su cine: el cine mudo, la época dorada, con su lado oscuro, quizás en el segundo lustro de los setenta se perdió la imaginación pese a la gran cantidad de directores jóvenes de la época. Entonces nació el cine de desastres, bastante tonto, y después directores como Coppola, Scorsese o Spielberg lograron que lo comercial no estuviera reñido con la calidad del cine, pero no hay una época. Hay diferentes épocas que responden a diferentes sociedades, y nos podemos encontrar películas excepcionales. Ahora mismo, creo que estamos viviendo una excelente época de cine.
–¿Los mejores actores?
–Un mundo de empresa y arte que lleva un siglo de historia no me atrevería a decir quién puede ser el mejor o el peor. Para mí, uno de los más completos ha podido ser Charles Chaplin porque era actor, productor, coreógrafo y no fallaba en nada. Se adaptaba a todas las épocas. Hay centenares de actores y actrices que tienen su momento gracias al director con el que trabajan y a la inversa. John Wayne podría estar muy encasillado, pero cuando trabajaba con John Ford el dúo era perfecto y el resultado era fascinante. Más contemporáneos, Bardem creo que a nivel internacional es uno de los actores más polivalentes y completos que uno se pueda imaginar. Puede hacer todo: drama, humor cuando su físico no invita a un papel determinado y lo hace bien todo, y Daniel Day-Lewis lo hace bien todo. Pero no puedo quedarme con unos pocos actores o actrices.
–¿Un director del que nunca se pierde su trabajo?
–En principio David Fincher, Ridley Scott , Nolan, los hermanos Cohen. De los clásicos: John Ford, Fellini, Chaplin.
–¿Qué opina sobre el cine actual?
–Me parece un cine fascinante . Estoy en desacuerdo con quién lo condena. El cine es espectáculo y los efectos especiales forman parte de él.
–¿Qué opinión le merece esa ‘mala prensa’ que arrastra el cine español?
–No entiendo esa mala fama. El cine español ha pasado, como todos los países, por muchas épocas, pero el del régimen anterior tenía la capacidad de hacer obras maestras como ‘Bienvenido Mr Marshall’ o ‘La tía Tula’, unas de las mejores obras de teatro versionadas en cine, pero incluso el cine de la Transición y el del ‘destape’ tenían su comercio, su público. Me quedo, por ejemplo, con ‘La escopeta nacional’. Eran directores que tenían una gran imaginación para saber criticar una época determinada.
Como ven, para Navarro, en el cine, no todo está dicho.
Me creo que se unos de los autores más versátiles, sobre todo para ir de progre y gastarse en alquilar una isla para su boda 175 mil dólares.